La Conmebol aceptó este jueves por unanimidad la renuncia del presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Marco Polo Del Nero, a su plaza en el Comité Ejecutivo de la FIFA.
"El Sr. Marco Polo Del Nero solicitó su salida del Comité Ejecutivo de la FIFA en representación de la Conmebol, e indicó al Sr. Fernando Sarney como su sustituto, lo que fue aprobado por unanimidad", afirmó la entidad en un comunicado tras la reunión de su directiva en Rio de Janeiro.
Poco después, la propia CBF confirmó la información en otro escrito donde subrayó que el personero mantendrá, sin embargo, su puesto en el Comité Ejecutivo de la Conmebol, y que su decisión de abandonar la cúpula de la FIFA se debe a que "optó por dar atención integral a los debates y temas del fútbol brasileño".
Ese es el argumento que viene esgrimiendo el directivo para justificar sus polémicas ausencias internacionales, desde que aterrizó en Rio de Janeiro horas después de la detención en Suiza de su predecesor y padrino político, José Maria Marin.
El ex presidente de la CBF fue arrestado el 27 de mayo en Zúrich acusado de corrupción junto a otros seis dirigentes de la FIFA, cuando se destapó el gigantesco esquema fraudulento en el fútbol mundial.
Del Nero no ha salido de Brasil desde entonces y ha faltado a todas las reuniones del Comité Ejecutivo de la FIFA, así como a la Copa América de Chile o el resto de partidos de la Scratch fuera del país.
Aunque Brasil no perderá una de las tres plazas que le corresponden a Sudamérica en la sala de decisiones de una FIFA en plena renovación.
El sustituto de Del Nero será Fernando Sarney, uno de los vicepresidentes de la CBF y miembro de una de las familias más poderosas del país.
