AFP
El expresidente uruguayo José Mujica ofició como mediador entre los jugadores y la gremial a la cual pertenecen con el fin de reactivar el fútbol uruguayo, que está paralizado por un conflicto sobre derechos de imagen.
Esto lo confirmó Mujica el domingo en el programa deportivo Punto Penal, del canal 10 local, y aseguró allí que tuvo éxito en lograr un acercamiento para una reunión entre las partes, aunque un representante de los futbolistas negó que se haya acordado concretar ese encuentro.
Según Mujica, "quienes mediamos tratamos de que razonen, tenemos amigos en los dos bandos", aunque aclaró que "la decisión siempre va a corresponder a ellos" (los representantes de los jugadores y la gremial).
"Al principio los noté muy radicalizados pero después de hablar, en el fondo tienen la necesidad de encontrar una salida viable", dijo Mujica, que ya se había reunido antes con el presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), Wilmar Valdez.
El conflicto, que paralizó este fin de semana al fútbol uruguayo y que ya lleva meses, es entre cientos de jugadores nucleados en el grupo "Más unidos que nunca" (MUQN) y la gremial la Mutual Uruguaya de Futbolistas Profesionales (MUFP) y tiene como centro las decisiones de la gremial, sobre todo, en cuanto a derechos de imagen de los deportistas.
Poco después de esas declaraciones, Michael Etulain, representante de "Más Unidos que Nunca", confirmó que Mujica se reunió con jugadores pero aclaró que el acercamiento expresado por Mujica "no es así" y que "recién el martes nos vamos a reunir entre nosotros y allí podremos decir qué pasó en esa reunión".
El conflicto se agravó porque los futbolistas paralizaron sus actividades y ello obligó a cancelar la octava jornada del torneo Clausura uruguayo 2017. Incluso pasó a la instancia política porque representantes de ambas partes fueron al Parlamento para abordar el tema con legisladores que intentan mediar para desactivar la situación.
MUQN reúne a jugadores del medio local y a otros que militan en el exterior, entre ellos de la selección uruguaya, y exige la salida de la directiva de la MUFP a la que acusan de mal manejo de los derechos de imagen de los atletas, que se prolonga desde 2016.
Los jugadores reclamaban una asamblea urgente para votar sobre la continuidad de la actual directiva, en tanto las autoridades de la MUFP quieren la instancia sin plazo definido y anunciaron que no dejarán sus cargos.