"Hoy habría sido tan famoso como Alexis Sánchez".
Así le dijo a BBC Mundo la hija de Jorge Robledo, conocido en Inglaterra como "George", el delantero chileno del Newcastle que en 1952 marcó el gol que selló la victoria de su equipo en el campeonato más antiguo del mundo: la Copa de la Asociación Inglesa de Fútbol (FA, por sus siglas en inglés).
Era el segundo año consecutivo que "Las Urracas" del noreste de Inglaterra ganaban el prestigioso trofeo, que en esa ocasión les fue entregado por el propio primer ministro, Winston Churchill.
Y el triunfo fue parte de una brillante carrera que convirtió al chileno en el mayor goleador extranjero de la liga británica durante casi medio siglo.
Pocos recuerdan la trascendencia y el rostro de Robledo. Pero miles de fanáticos de los Beatles conocen su figura: el delantero chileno vive en la carátula de un disco de John Lennon.
El músico lo dibujó cuando era un niño y lo firmó así: "John Lennon Junio 1952 Edad 11".
Es un dibujo infantil, pero se aprecia claramente la figura del jugador chileno al momento de marcar el tanto en la final frente a Arsenal, que le daría la copa a su equipo en el estadio de Wembley en Londres.
Gracias al 9
El dibujo de Lennon imita la fotografía más famosa de la final de ese 3 de mayo de 1952: Robledo de frente, observando cómo la pelota cruza la línea del arco del Arsenal.
De espaldas, otra figura histórica del Newcastle, Jackie Milburn, con el 9 en la camiseta, quien tal vez haya sido el principal motivo de inspiración de Lennon.
22 años más tarde, el legendario cantante incluyó ese recuerdo de su infancia en las tapas de su disco solista Walls and Bridges, de 1974.
El dibujo del jugador pasó desapercibido durante décadas hasta que en 2009, un escritor chileno, Néstor Flores, ató los cabos y lo contó al mundo: el jugador en las tapas del octavo disco solista de Lennon era Jorge Robledo.
"Esa noche me acosté cerca de la 1 de la mañana. Pensando: 'esta foto yo la he visto en otra parte'. Con esa frase me quedé dormido. Y como a las 4 de la mañana me despierto y digo: 'esta foto es igual a la de la carátula del disco Walls and Bridges' de John Lennon'".
Debe haber visto en la foto a un jugador con la dirección de su casa
"Me levanto, agarro el disco y lo comparo con la foto. Y eran exactamente iguales, excepto por pequeñas diferencias porque, claro un niño de 11 años, como era Lennon en ese momento, no podía graficar de manera idéntica la foto. Me quedé en silencio un rato, meditando. Empecé a buscar en internet si alguien había reparado en esto. Y nadie lo había hecho", le contó Flores a la BBC.
Por su hermano
El escritor y publicista porteño (vive en Valparaíso, uno de los principales puertos de Chile) era la persona perfecta para el hallazgo.
Jorge Robledo tenía un hermano, Eduardo Oliver "Ted", que lo acompañó durante toda su carrera futbolística. Juntos jugaron en Newcastle y juntos volvieron a Chile, en 1953, contratados por el popular equipo de Colo-Colo. Cuando Jorge se retiró del fútbol, trabajó en la minería del cobre y luego en un colegio en Viña del Mar, cuenta su hija.
La vida de Jorge Robledo como futbolista es fabulosa. Pero la de Ted es envolvente
Ted, el hermano, abrió la oficina de la NASA en Chile, cuenta Flores, el escritor. Luego trabajó en el área de la explotación petrolera y un día, en 1970, desapareció desde un barco. Su cuerpo nunca fue encontrado y las circunstancias de su muerte nunca fueron aclaradas.
"Fue el momento más triste de mi infancia, cuando mi papá recibió la noticia de mi tío. Yo tenía 7 u 8 años, y recuerdo a toda la prensa metida en mi casa. Fue terrible", cuenta Elizabeth.
Y fue por eso que pese a la popularidad de Jorge, Flores decidió escribir la historia de Ted.
"La vida de Jorge Robledo como futbolista es fabulosa. Pero la de Ted es envolvente. Porque en el golfo de Omán aborda un crucero el 5 de diciembre de 1970. Un día después, el crucero vuelve a tierra y él no está. A mí me sorprendió mucho que alguien desapareciera en un crucero".
Y fue durante su investigación que Flores encontró la foto de Jorge Robledo en el triunfal partido del Newcastle.
"Pedí a Inglaterra que me mandaran fotos de los diarios de la época. Yo quería saber, para mi investigación, en qué momento Ted abrazaba a Jorge después del gol con el que ganan la copa.
Quería saber si había sido el primero en llegar a abrazarlo, o el segundo, o si no había podido porque los demás lo tapaban", explicó el escritor chileno.
"Y en la prensa inglesa fueron muy gentiles, me mandaron sus fotos de archivo. Pero cuando vi la imagen, me quedó dando vueltas: sabía que la había visto en otro lado".
Y no la había visto sólo una vez, pues además de hijo de un admirador del juego de los Robledo, Flores es un declarado beatlemaniaco.
El "George" chileno
Jorge Robledo nació al norte de Chile en 1926, en Alianza, una de las oficinas del desierto de Atacama donde se explotaba el salitre, que había generado grandes fortunas durante la Primera Guerra Mundial (se usaba para la pólvora), pero que en esos años ya se encaminaba a su ocaso.
"A los 3 años se fue de Chile con su hermano menor, Ted, y su madre embarazada. El padre se quedó en Chile", le contó desde Australia a BBC Mundo Elizabeth Robledo.
"Se criaron en Inglaterra. Sé que fue una etapa difícil en su vida. Mi papá trabajaba en las minas de carbón para ayudar a la familia. Al fútbol empezó a jugar por el Barnsley".
"A los 15 años ya jugaba profesionalmente, con un permiso de su mamá, porque era menor de edad. Luego el Newcastle lo vio jugar y se lo llevó con mi tío Ted, porque mi papá se llevaba al hermano para todos lados".
"Jugaban en tercera división", agrega Néstor Flores. "Allí Jorge Robledo se catapultó como un tremendo goleador y Ted más bien como un deportista más general. El Newcastle los contrata en 1949 y Jorge destaca, porque era un gran futbolista".
La hija cuenta que Jorge, conocido como George, "siempre tuvo a Chile en su memoria. Aunque no hablaba español, Chile nunca se le fue de la mente. Cuando se hizo conocido en Inglaterra el embajador chileno dio la voz de alerta y empezaron las gestiones para traerlo".
Robledo siguió su carrera como goleador en Colo-Colo, jugó por la selección chilena y en 1961 se retiró del fútbol. Trabajó en la minería del cobre y finalmente, como director de deporte de un colegio.
"Mi mamá, que ya falleció, me contó lo del disco de Lennon. Néstor Flores me regaló el álbum. Fue emocionante. Me puso los pelos de punta. Todavía miro y miro el cuadro", recordó la hija, que regresará a vivir en Chile tras más de dos décadas en Australia.
"No sé si le gustaba Lennon, pero sé que cuando era chica me regaló la colección completa de los Beatles. Nunca le pregunté si me la regaló por mí o por él".
Lo que le gustaba oír a Robledo era la música de gaita. "Era la música que se oía en Inglaterra, en sus premiaciones. Lo emocionaba muchísimo. Mi papá vivía con una melancolía así, como emocionada. Yo crecí con sus recuerdos".
Jorge Robledo murió de un infarto al corazón a los 72 años, en 1988. "Una mañana mi mamá despertó y él no se movía. Murió en el hospital. Fue algo totalmente inesperado".
¿Y habría sido George Robledo el Alexis Sánchez de esta época?
"Eran tiempos distintos: no eran tiempos de 'social media', no existía el mismo boom de cobertura, no había medios globales", dice la hija.
Fue el primer jugador que se vio en Chile dar pases de cabeza, o de 30 metros
"Pero él siempre se sintió querido y respetado, y hasta hoy lo recuerdan. Se ha dicho que el fútbol chileno se divide antes y después de Jorge Robledo, porque venía con tácticas de Inglaterra: no hacía pases de balón a persona, sino que proyectaba el balón. 'La pelota corre más rápido que uno'", decía siempre".
"Para la época tenía el mismo estado físico que Alexis Sánchez", asegura Flores, "pero Robledo era más completo. Pateaba con las dos piernas. Fue el primer jugador que se vio en Chile dar pases de cabeza, o de 30 metros".
"Cuando llegó a Chile contratado por Colo-Colo, salieron campeones de inmediato. El año siguiente todos los equipos chilenos querían jugar como el Colo-Colo de Robledo".
Los Beatles: poco futboleros
En una historia de coincidencias y preguntas que siguen abiertas, una de las dudas es, por qué Lennon dibujó la jugada.
Pese a venir de una ciudad con una larga tradición futbolera, como Liverpool, las referencias de los Beatles al balompié siempre fueron esquivas o ambiguas. Es famosa la frase de George Harrison: "Hay tres equipos en Liverpool, y a mí me gusta el otro".
Las referencias directas al fútbol son escasas en la rica obra del cuarteto: como el jugador del Liverpool que aparece en la carátula del "Sgt. Pepper´s Lonely Heart Club Band" (Albert Stubbins, detrás de Marlene Dietrich) o la bufanda con los colores del mismo club –blanco y rojo– que comparten los músicos en una escena de la película "Help!".
"Aparecen dos jugadores del Newcastle en la foto", aventura Néstor Flores sobre el dibujo de Lennon.
"Uno que es Robledo, y otro que es el número 9, Jackie Milburn. Y John Lennon vivió en el número 9 de la calle Newcastle cuando era pequeño. Él tomó esa coincidencia. Debe haber visto en la foto a un jugador con la dirección de su casa".
El disco además incluye otra referencia al 9, en el tema "#9 Dream", "Sueño número 9", el mismo número que se repite en otro tema del guitarrista junto a Yoko Ono y Paul McCartney para los Beatles y que Lennon describió también como onírico: "Revolution 9".
Aparte de eso, las referencias se vuelven vagas.
En diciembre de 1974, Lennon era entrevistado por el legendario periodista deportivo estadounidense Howard Cosell en un partido de fútbol americano.
"Es un espectáculo y una vista espectacular, hace que los conciertos parezcan una invitación a tomar té... No se parece al fútbol, pero veo una relación cercana con el rugby", le decía Lennon al comentarista (el mismo Cosell informaría el asesinato de Lennon en la televisión norteamericana el 8 de diciembre de 1980, en medio de la transmisión de un partido de fútbol americano).
"La historia tuvo harto vuelo el 2010, cuando se cumplieron los 30 años de la muerte de Lennon", remata Flores sobre el dibujo de Robledo.
"Con el correr del tiempo no le hemos dado el peso suficiente. Pero al interior de los muchachos beatlemaniacos, todos están conscientes de este gran suceso: que hay un chileno dibujado en la carátula de un disco de Lennon".