El entrenador del Manchester City, el español Josep Guardiola, no escondió este viernes su poco interés por la Copa de la Liga, que obliga a “desperdiciar mucha energía” a jugadores y técnicos para un trofeo que considera poco prestigioso.
“Cuando se gana este trofeo, está bien, pero después no es algo por lo que se reciba mucho crédito. Este trofeo está bien cuando ganas otro. Pero desperdicias mucha energía”, señaló en la conferencia de prensa de este viernes, en la víspera del duelo de la sexta jornada de la Premier League contra el Crystal Palace.
El elenco del técnico hispano se impuso al West Bromwich por 2-1 este miércoles, en la tercera ronda de la Copa de la Liga, en un duelo donde el portero chileno Claudio Bravo sumó su primera aparición como titular de la temporada en el arco “cuidadano”.
“Imaginen ustedes jugar contra el equipo de Tony Pulis (famoso por su solidez física) durante 90 minutos y luego pasar tres o cuatro horas en el autobús. Tres días después es el Crystal Palaces y tres días después el Shakhtar Donetsk, otros tres-cuatro días después, es Stamford Bridge (Chelsea). Para los entrenadores es mucha energía desperdiciada”, argumentó el español.
“Está bien para los jugadores poco utilizados”, añadió Guardiola, dejando en claro que será una competición donde actuarán aquellos integrantes del plantel que no cuentan para torneos mayores, donde el capitán de “La Roja” estaría incluido.