FC Barcelona golea a Lyon con presencia de Arturo Vidal y avanza en la Champions
AFP/T13.cl
FC Barcelona se metió este miércoles en los cuartos de final de la Liga de Campeones goleando 5-1 al Lyon, con doblete de Lionel Messi, en el partido de vuelta disputado en el Camp Nou. La ida en Francia había terminado sin goles.
El volante chileno Arturo Vidal arrancó entre los suplentes, pero ingresó a los 74 minutos de juego, cuando el Barça sólo ganaba 2-1 y estaba en duda su clasificación.
En un partido dominado por los locales, Messi abrió el marcador de penal (17’), antes de Philippe Coutinho hiciera a puerta vacía el 2-0 (31’), mientras Tousart recortó distancia (58’) sólo para ver como Messi (78’), Gerard Piqué (80’) y Ousmane Dembelé (85’) sentenciaban el encuentro y el pase.
El Barça, con Arthur distribuyendo juego, se instaló en campo contrario en el primer tiempo, ante un Lyon, que sin la pelota, buscaba hacer daño al contraataque.
Un disparo raso de Tanguy Ndombele (10’) que se fue fuera lamiendo el poste demostraba que el peligro francés existía, pero llegó el primer gol azulgrana cuando Luis Suárez cayó en el área en un choque con Denayer que el árbitro castigó con penal.
Messi se encargó de transformar la pena máxima a lo Panenka para adelantar a los azulgranas en el marcador (17’).
El Lyon llegaba en destellos esporádicos al área de Marc-André Ter Stegen con tiros de Moussa Dembelé (20’), pero la peor noticia para el equipo francés fue la lesión de su portero Anthony Lopes tras un choque con Coutinho.
El meta portugués tras ser atendido en el campo siguió jugando unos minutos, en los que vio como Suárez recortaba en el área para irse hacia adentro y ante la salida del portero dar el balón a su izquierda donde apareció Coutinho para marcar a puerta vacía (31’).
A la vuelta de la pausa, el Lyon dio un paso adelante y buscó manejar el balón.
Dos disparos de Nabil Fekir (56’) y de Ferland Mendy (57’) fueron la antesala del gol francés cuando Lucas Tousart cazó un rechace soltando un disparo que supuso el 2-1 (58’).
Cuando peor lo estaba pasando el Barcelona, apareció Messi para desatascar al equipo y meter el gol de la tranquilidad.
El capitán azulgrana se fue con la pelota, recortó a dos defensas y soltó un disparo flojo que entró ajustado al palo (78’), al que seguirían los goles de Gerard Piqué a puerta vacía (80’) y Dembelé (85’).