Han pasado 30 días desde la noticia que remeció al mundo del fútbol. Un mes desde que un avión de la aerolínea LaMia se estrelló, dejando 71 personas muertas, entre ellos gran parte del plantel del equipo de fútbol Chapecoense que se preparaba para disputar su primera final de Copa Sudamericana.
También hubo seis sobrevivientes: tres futbolistas, dos sobrecargos y un periodista. este último, Rafael Henzel, habló en exclusiva con Teletrece sobre el accidente que marcó su vida.
"Cuando desperté, lo hice porque vi luces. Miré para la derecha, observé las luces y me tranquilicé. Dije: 'hay personas a salvo'", relata el periodista de Rádio Oeste.
Henzel comenta que estaba atrapado por el cinturón de seguridad y que no conseguía salir, pero que finalmente los socorristas lograron verlo. Después de él, solo pudieron rescatar con vida al defensa Hélio Neto. "Pedía agua y que llamasen a mi familia", dice el periodista.
Lamentablemente, ahora le ha tocado vivir el proceso posterior al accidente y sus secuelas psicológicas: "Era todo muy chocante, estábamos muy sensibles, perdimos amigos. Estamos luchando para vivir. Cualquier imagen de los homenajes eran muy fuerte, lo evitábamos durante la recuperación. Teníamos que llorar, lloré mucho. Y cuando lloraba, convulsionaba".
"Gracias a Dios nadie sintió el momento del impacto", recuerda.