AFP
Celta de Vigo visita este jueves al Krasnodar ruso a las 15:00 horas de nuestro país, en la vuelta de los octavos de final de la Europa League, buscando su pase a la siguiente fase con la pequeña ventaja del 2-1 logrado en la ida en España.
"Ese partido del jueves tiene una trascendencia mayúscula por ser a vida o muerte, porque es una eliminatoria", advirtió el lunes el técnico del Celta, el argentino Eduardo "Toto" Berizzo, quien espera "volver sonriente de Rusia".
No obstante, Berizzo sabe que la ínfima ventaja lograda gracias al gol en el último minuto del francés Claudio Beauvue no garantiza el pase.
"Salimos victoriosos pero no nos sentimos favoritos", advertía el técnico, tras el partido de ida el pasado jueves.
"Hay que jugar este partido como una final", dijo el martes el capitán "celtiña", Hugo Mallo, afirmando que "nosotros no sabemos especular ni guardar resultados. Tenemos que salir a ganar pero sin volvernos locos".
El equipo gallego, único superviviente español en la Europa League, no ha vuelto a meterse en unos cuartos de final de un torneo continental desde que alcanzó esta fase en la Copa de la UEFA 2000-2001.
Sin Marcelo Díaz
Los "celestes" llegan a este partido apenas unos días antes del derbi gallego contra el Deportivo de La Coruña del domingo, pero Berizzo insiste en que primero está el Krasnodar.
El técnico argentino espera recuperar para este encuentro al chileno Pedro "Tucu" Hernández, quien se perdió la ida por una microrrotura fibrilar en la pierna derecha. En cambio tendrá la baja sensible del mediocentro – también chileno – Marcelo Díaz.
El "Chelo" Díaz sufrió el domingo en el partido de Liga contra el Villarreal (derrota 1-0) un "esguince de grado II del ligamento lateral interno de la rodilla derecha", que le mantendrá apartado de los terrenos de juego "en torno a 4-5 semanas".
Frente a los gallegos estará un equipo ruso dispuesto a la remontada después que su entrenador Igor Shalimov considerara "positivo" el resultado de la ida.
El Krasnodar, al contrario que el Celta, llega al duelo tras imponerse 2-1 en el campo del Lokomotiv de Moscú aupándose hasta el cuarto puesto de la liga rusa a cuatro puntos del segundo y tercer clasificados, el CSKA de Moscú y el Zenit, respectivamente.
El equipo ruso recupera para este encuentro a su centrocampista Pavel Mamaev, autor de uno de los goles frente al Lokomotiv y que en la ida ante el Celta sólo pudo jugar unos minutos.
En cambio, Shalimov sigue sin poder contar con su delantero estrella Fiódor Smólov, máximo goleador del equipo ruso y víctima de un desgarro muscular, que no jugó en Vigo y ni siquiera se vistió frente al Lokomotiv.
