AFP/ Deportes 13
Cuatro muertos y más de 15 heridos fue el saldo de la final entre Motagua y Honduras Progreso en Honduras, partido válido por la final de fútbol de dicho país, donde una turba hinchas escapaban de la policía tras haber ingresado de forma violenta al Estadio Nacional de esa nación, desencadenando la fatal escena.
El portavoz del estatal hospital Escuela, Miguel Osorio, dijo a AFP que "dos personas murieron en el estadio y dos en el hospital", donde estaban internados otros 15 aficionados, aunque medios locales aseguraron que fueron cerca de 25.
Las cuatro personas "murieron de manera accidental al ser embestidos por la turba de aficionados que ingresaban de manera violenta por el portón", explicó en un comunicado el ministerio de Seguridad.
Añadió que el estadio, que puede acoger 35.000 espectadores "había alcanzado la máxima capacidad de asistentes y en las afueras una multitud esperaba ingresar con sus respectivos boletos".
Indicó que cientos de aficionados entraban a la fuerza por un portón de la gradería popular, ante una sobreventa de boletos, y para tratar de controlarlos, la policía lanzó las bombas de gas y potentes chorros de agua con una tanqueta.
La aglomeración de los aficionados escapando de los gases y del agua causó los muertos y heridos, según algunos testimonios.
Motagua se coronó campeón tras vencer 3-0 al Honduras Progreso, logrando así un inédito bicampeonato para aquel equipo que en el global se impuso 7-1, tras ganar de visita por 4-1.