En un combate dominado de principio a fin, el británico Tyson Fury derrotó este sábado 22 de febrero por nocaut técnico al hasta ahora invicto estadounidense Deontay Wilder y le arrebató el título de los pesos pesados del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), en el MGM Grand Garden Arena de Las Vegas.
Fury (30-0-1) rompió los pronósticos venciendo con claridad al estadounidense, llevándole al suelo varias veces en el tercer y quinto asalto antes de que, en el séptimo round, desde su esquina, se lanzara la toalla (que significa rendirse) y se decretara el nocaut técnico. "Ahora quiero decir que el rey ha vuelto al trono", dijo el nuevo campeón.
El lanzamiento de la toalla provocó breves quejas de Wilder, que se tambaleaba sangrando visiblemente de su oreja izquierda y boca. Su registro con su derrota quedó en 42 victorias, 1 derrota y 1 empate.
Pero el suceso que marcó la pelea fue el intento de Tyson Fury de lamer el cuello ensangretado de su rival, cuando ambos se encontraban luchando. ¿Alcanzó con su lengua la sangre de Deontay Wilder?