Rusia está en medio de uno de los mayores escándalos de dopaje en la historia del deporte luego de que varios de sus atletas fueran suspendidos como resultado de una investigación por las denuncias que apuntan a un programa de dopaje generalizado patrocinado por el Estado. La participación de muchos deportistas de este país en los Juegos Olímpicos de Río está en duda a raíz del caso.
Citando al ex jefe de la agencia antidopaje de Rusia, el New York Times informó la semana pasada que expertos antidopaje rusos y miembros de los servicios de inteligencia reemplazaron muestras de orina contaminadas con sustancias para mejorar el rendimiento con recipientes de orina limpia.
Sanciones, multas y exclusiones
"Si estas acusaciones son ciertas detendremos a todos los responsables que estén implicados y hay diferentes tipos de acciones posibles" de realizar, dijo Bach en una conferencia telefónica, citando potenciales sanciones o multas para los atletas o exclusiones de federaciones enteras de los Juegos Olímpicos.
El Kremlin rechazó las acusaciones que apuntan a que Rusia llevó a cabo un sofisticado programa de dopaje en los Juegos de 2014 y calificó de "traidor" al exjefe de la agencia local antidopaje Grigory Rodchenkov. "En caso de que la investigación (sobre Sochi) demuestre que las denuncias son verdaderas, representaría una nueva dimensión impactante en el dopaje con un, hasta ahora, nivel sin precedentes de criminalidad", dijo Bach.