Los restos del legendario Diego Maradona fueron inhumados este jueves en un cementerio privado, al noroeste de Buenos Aires, en una ceremonia íntima cuando comenzaba a caer la noche que contrastó con el multitudinario y caótico velatorio previo.
Frente a la tumba, al lado de la de sus padres, amigos y familiares estallaron en aplausos, según imágenes registradas por drones y transmitidas por el canal TyC.
El féretro llegó al cementerio privado "Jardín de Bella Vista", cubierto por una bandera argentina, constató la AFP.
Los restos fueron trasladados en un cortejo fúnebre desde la Casa Rosada, donde se realizó un velatorio público por unas 11 horas, que se suspendió en medio de incidentes con miles de fanáticos pugnando por ingresar al palacio de gobierno.
Maradona falleció el miércoles a los 60 años de un paro cardíaco y sus restos fueron velados en la Casa Rosada, por decisión de la familia. Durante casi 10 horas desfilaron frente al féretro miles de personas pero al anunciarse un inminente cierre de la despedida se desataron los incidentes.
"Claudia (Villafañe) y las hijas de Maradona hicieron en un velorio íntimo a cajón abierto dándole un último adiós hasta que se retire el féretro de la Casa Rosada", señaló a la AFP una fuente gubernamental.
La decisión de cerrar el velatorio se tomó luego de que fanáticos invadieron los patios internos de la Casa Rosada lo que obligó a retirar el féretro de la capilla ardiente, mientras en la calle la policía se enfrentaba con hinchas del ídolo argentino.
El traslado del féretro se produjo justo después de que las autoridades anunciaran la extensión por tres horas del velatorio del '10', que finalmente se suspendió.
En un principio se había programado un velatorio de 10 horas a pedido de la familia y ante la enorme afluencia de gente se resolvió extenderlo pero los incidentes volvieron para atrás la decisión.
La municipalidad de San Miguel, el municipio donde está localizado el cementerio privado donde será inhumados los restos del campeón mundial de México-1986, advirtieron en un comunicado que el entierro será exclusivo para los familiares.
Indicaron en un comunicado que en los próximos días evaluarán organizar visitas en grupo abiertas al público.
En varias calles del centro de Buenos Aires, cerca de la sede gubernamental, la policía reprimió con balas de goma y gases lacrimógenos a grupos de hinchas que arrojaban botellas y piedras.
Los desmadres ocurrieron cuando la policía intentó poner un límite a la fila de personas a falta de dos horas para el final del velatorio, según el horario previsto inicialmente.
Los incidentes obligaron a una extensión del velatorio por tres horas hasta las 19H00 locales (21H00 GMT), pero la confusión contribuyó a alimentar los desbordes que la policía reprimió en forma desordenada, generando corridas generalizadas.
Muchas personas, creyendo que el cortejo fúnebre desfilaría sobre la avenida 9 de Julio permaneció en el lugar, pero fueron también reprimidos en un ambiente de caos generalizado que incluyó violentas reacciones contra la policía.
Imágenes de televisión mostraron heridos de bala de goma y detenidos, aunque no hay información oficial.
Pese al cierre de las puertas de la Casa Rosada, centenares de hinchas se agolparon en la Plaza de Mayo y algunos se trepaban a las rejas que protegen la sede gubernamental, a la espera de la salida del cortejo fúnebre.