No hay país ni fútbol capaz de librarse de la particularidad del argentino Marcelo Bielsa.
Si fue sorpresiva su presentación el año pasado como técnico del Leeds de la segunda división del fútbol inglés, más lo han sido sus métodos de entrenamiento que han guiado a los blancos de Ellan Road hasta el primer puesto de la clasificación.
Apodado "el Loco", Bielsa pidió a comienzo de la temporada saber cuántas horas trabajaban en promedio los aficionados de su equipo para poder pagar la entrada al estadio.
La respuesta fue tres, por lo que ordenó a sus jugadores a pasar tres horas recogiendo basura alrededor del campo de entrenamientos para que supieran los sacrificios que tienen que hacer los hinchas para disfrutar de su pasión.
En Inglaterra era conocida su fama de ser un técnico obsesionado, detallista y perfeccionista, amante del fútbol del ofensivo y mentor de varios de los entrenadores que están dominando el juego como Pep Guardiola, Diego Simeone o Mauricio Pochettino.
Pero nadie esperaba lo que sucedió la semana pasada previo al partido del Leeds contra el Derby y mucho menos lo que pasó este miércoles en una rueda de prensa convocada de imprevisto por el técnico argentino.
¿Espionaje?
En los últimos días Bielsa ha sido acusado de "tramposo" y "falto de ética" por haber enviado a un miembro de su cuerpo técnico a observar un entrenamiento del Derby, acción que la liga de fútbol está investigando y que la prensa ha calificado como Spygate (El caso de espionaje).
Sin temor a las consecuencias, Bielsa no solo confirmó que esa es una práctica que suele hacer con todos los rivales a los que se enfrenta, si no que argumentó su posición con una presentación audiovisual que duró más de una hora.
"Yo observé a todos los rivales contra los que hemos jugado y he visto entrenamientos de todos los oponentes", dijo.
"Toda la información que necesito para estar claro la recolecto sin mirar las sesiones de entrenamiento de mis oponentes, entonces ¿por qué envié a alguien a observarlos? Simplemente porque pensé que no estaba violando ninguna normativa".
"Nos sentimos culpables si no trabajamos lo suficiente. Eso me permite tener menos ansiedad y en mi caso soy lo suficientemente estúpido para permitir esta clase de comportamiento", agregó.
El argentino reiteró que no había hecho "nada ilegal", pero acepta que tendrá que "respetar las sanciones" que pueda recibir o que caiga sobre el equipo.
Avergonzado
En una extraordinaria intervención, Bielsa le mostró a los periodistas cuánta preparación y análisis él y su equipo de trabajo hacen de cada rival antes del partido.
Aseguró que eso les lleva unas cuatro horas por partido.
Entre la información que compartió fue el porcentaje de partidos en los que Derby utilizó determinadas formaciones, los jugadores que utilizó en cada posición y el estilo de juego contra los que tuvieron problemas esta temporada.
"Siento vergüenza de tener que contarles todo esto", agregó Bielsa, quien también expuso información sobre algunos jugadores de los Rams.
Sobre el final el argentino fue enfático: "No he hecho trampa. Supe todo lo que necesitaba saber".
Admiración y reproche
La sorpresiva convocatoria y los antecedentes de Bielsa hizo que muchos periodistas especularan sobre su posible renuncia, y otros se preguntaban si se trataba de una broma del día de los inocentes.
Pero luego de haber presenciado su charla hubo consenso de que se trató de una "clase magistral" y que el fútbol inglés tiene un "genio".
Otros se sorprendieron de la anécdota que compartió cuando le mostró su análisis de cómo preparó el partido que Athletic de Bilbao perdió en la final de la Copa del Rey contra el Barcelona.
"Guardiola lo observó y me dijo, 'tú sabes más del Barcelona que yo'. Pero fue información que no sirvió para nada porque ellos anotaron tres goles", recordó.
El legendario goleador inglés, Gary Lineker, admitió "amar" a Bielsa, pero no a todos les pareció correcto lo que hizo.
Frank Lampard, técnico del Derby, dijo que había sido algo "malo" y "poco ético", afirmando que había "entorpecido" su preparación para el partido que terminaron perdiendo 2-0.
El mismo Leeds le recordó a Bielsa de la "integridad y honestidad" del club.
Mientras la liga abrió una investigación por lo "que parece va en contra de los estatutos" que todos los clubes firmaron en 2018.
Otros que fueron críticos contra el "espionaje" del argentino fueron los exfutbolistas y comentaristas de la BBC, Alan Schearer y Jermaine Jenas, quienes consideraron que "estuvo mal" y que no forma parte del "espíritu del juego".
Sin embargo, ambos coincidieron que ni el técnico ni el club deberían ser castigados ya que el Leeds lidera la clasificación por "méritos propios".