Aníbal Mosa, el presidente de Blanco y Negro, la concesionaria que mueve los hilos de Colo Colo, llegó este miércoles hasta el Centro de Justicia de Santiago para presentar una querella contra los responsables de los incidentes registrados el domingo en el Estadio Monumental, durante el suspendido duelo entre el “Cacique” y Universidad Católica.
Además de referirse a los lamentables acontecimientos, el mandamás albo puso en duda por primera vez la continuidad del técnico Mario Salas. Y si bien reconoció que no está conforme con el desempeño del equipo, igualmente admitió que siguen confiando en el trabajo del “Comandante”.
“Marzo es crucial. Nosotros armamos este plantel para ganar el campeonato y para tener una buena Libertadores. No nos gusta donde estamos, pero esperemos que los triunfos puedan llegar”, dijo Mosa en el Centro de Justicia.
“Los respaldos son absolutos mientras existen. Cuando no existen, dejan de ser absolutos. Nos gusta mantener procesos, pero las realidades deportivas también tienen que estar sobre la mesa”, recalcó.
Mosa también negó estar contacto con algún otro técnico y se mostró en contra de las optimistas declaraciones del DT. “No lo comparto. Hay partidos que se han jugado bien, y otros que se han jugado mal”.
“No nos gusta donde estamos, sin duda. ¿A quién le puede gustar la manera en que está jugando el equipo? Hace mucho tiempo que no perdíamos tres partidos seguidos, pero nosotros seguimos confiando en el trabajo de Mario y veremos más adelante cómo se desarrollan los hechos”, cerró el timonel del “Popular”.