Este viernes el regreso del fútbol chileno se vio frustrado. Y es que a los 67 minutos del segundo tiempo en el cruce entre Unión La Calera vs. Deportes Iquique en el estadio Bicentenario de La Florida debió ser suspendido por la invasión de barras bravas al recinto deportivo.
Por eso es que los jugadores iquiqueños y caleranos debieron correr a camarines para resguardarse, y luego que se restableció la calma dentro del estadio ubicado en Enrique Olivares, los jugadores volvieron a salir al campo.
Luego de reunirse directivos de ambos equipos, y el presidente de la ANFP, Sebastián Moreno, se decidió no reanudar las acciones.
Tras la decisión el timonel del fútbol chileno comunicó que "lamentablemente vamos a tener que suspender este partido", dejando en suspenso lo que sucedará con el resto de la fecha programada para este fin de semana.
Moreno indicó que "lo más importante es resguardar la seguridad de los jugadores", por lo que al no tener los medios necesarios, no expondrán a los deportista.
Al ser consultado si se podrá suspender otros partidos, indicó que deben "analizar, no estamos dispuestos en poner en riesgo a nadie", expresó.