El domingo se informó la muerte de Victoria San Martín Godoy, la joven de 23 años que cayó desde una micro en movimiento en Concepción, en la región del Biobío, accidente ocurrido alrededor de las 17:00 horas del pasado viernes 22 de abril en el sector de Lomas de San Sebastián.
El conductor de la máquina, Richard Gatica Yáñez, de 65 años, le pidió perdón a los padres de la estudiante de gastronomía y reconoció que abrió la puerta del microbús cuando todavía se encontraba en movimiento.
“Primero, voy a pedirle a los padres de la niña, que me disculpen, me perdonen. El dolor no se los puedo sanar, pero yo sí tengo mucha fe en Dios. No fue mi intención, lo que pasa es que el sistema de locomoción es así, pregúntele a cualquier chofer, entonces uno se anticipa”, señaló el hombre, en declaraciones que publicó Meganoticias.
“Yo vengo en el recorrido y la niña me pide que le paré en la vueltecita. Eso no es paradero, pero uno por voluntad le para. Pero uno trabaja en automático y en ese momento yo empiezo abrir la puerta, pero estoy mirando hacia la izquierda a ver si viene un vehículo, porque voy girando hacia la izquierda, entonces perdí el norte de la niña”, continuó.
“Solamente cuando un caballero me dice ‘pare, pare, pare’ yo miré el espejo y vi a la niña tirada en el suelo”, recordó.
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El conductor continuó con su relato y detalló que “cuando ella me habló venía en el segundo asiento, venía sentada. Obviamente, yo la vi allá. Después empiezo a girar y abrir automáticamente la puerta. Ahí abrí la puerta, no venía con la puerta abierta... Iba en movimiento”.
“Nunca vi que la niña estaba al lado, porque perdí el norte. Si veo que está al lado, yo paro o cierro la puerta”, afirmó.
Gatica asegura que ésta es una práctica que suele emplearse para ganar tiempo. “Mi intención es siempre hacer el servicio, porque uno trabaja con el tiempo. Tenemos como diez relojes y en todos los relojes tenemos que ir manteniendo la frecuencia. El sistema de locomoción es así, te exigen mantener la frecuencia”, señaló.
“Estoy consciente de que yo al girar abrí la puerta, porque uno trabaja así. Ese fue mi error”, admitió.
Además, recalcó que dice la verdad y reiteró sus disculpas a los padres de Victoria.
“Lo reconozco, no tengo por qué estar mintiendo. Tengo mucha fe en Dios y sé que él está mirando todo, y lo único es que les pido perdón a los padres”, afirmó.
“Después de esto no podía estar tranquilo, mi familia tampoco. Yo también tengo hijos, no le puedo pagar ese dolor a esas personas, a los padres. Jamás en mi vida me ha pasado nada, nunca he tenido un problema, en esta empresa llevó como 23 años, nunca jamás, un choque, atropellos menos”, continuó.
Tras el accidente, el conductor fue formalizado por cuasidelito de lesiones graves, quedando con arraigo nacional y firma mensual ante Carabineros.
Sin embargo, desde la Fiscalía advierten que la muerte de la joven plantea un nuevo escenario judicial, por lo que el Ministerio Público solicitará al Juzgado de Garantía de Concepción que programe para los próximos días una nueva cita al imputado, quien será reformalizado por cuasidelito de homicidio.
