Cuáles son los trayectos más ruidosos del metro de Londres y qué consecuencias hay para la salud
Diversos tramos del metro de Londres son "lo suficientemente ruidosos como para dañar la audición de los pasajeros".
A esa conclusión llegó el doctor Joe Sollini del Instituto del Oído del University College de Londres (UCL), quien analizó los niveles sonoros registrados por la BBC.
El académico indicó que Victoria es en promedio la línea más ruidosa, mientras que otras secciones del metro son equivalentes a un "concierto de rock".
También se detectó que hay tramos de las líneas Northern y Jubilee que son tan ruidosos que si fueran lugares de trabajo se requeriría el uso de protectores auditivos.
Más ruidoso que un helicóptero
La BBC registró durante una semana los sonidos del metro en las zonas 1 y 2 utilizando medidores provistos por el UCL.
El sonido más alto registrado en el servicio subterráneo en el centro de Londres fue entre las estaciones Liverpool Street y Bethnal Green, que alcanzó un máximo de 109 decibeles, más alto que el que produce un helicóptero en pleno despegue y casi equiparable al sonido de una motosierra.
El doctor Sollini analizó la información recogida por la BBC y la calificó de "preocupante", ya que en cualquier lugar de trabajo, sonidos superiores a 85 decibeles requieren el uso de protectores auditivos.
"La pérdida de la audición se acumula a lo largo de nuestra vida", dijo.
"Riesgo de pérdida de la audición"
Sollini precisó que "si alguien está en una línea ruidosa todos los días en trayectos largos, es perfectamente posible que eso pueda incrementar el riesgo de pérdida de la audición y provocar tinnitus", que es una sensación auditiva que consiste en percibir sonidos que no proceden de fuentes externas.
Peter Roger del Instituto de Acústica instó a Transport for London (TFL), la empresa que presta el servicio, a utilizar "vagones más silenciosos".
"Lo podemos hacer en los trenes, entonces deberíamos hacerlo en los vagones del metro de Londres, creando una experiencia más calma y placentera", aseguró.
"Daño poco probable"
Nigel Holness de TFL, en tanto, indicó que se monitorean los niveles sonoros y que se están investigando otras opciones para "reducir el ruido".
"Mientras los consumidores viajan en nuestra red pueden experimentar altos volúmenes de ruido por cortos períodos y la guía de Salud y Seguridad sobre ruido sugiere que es muy poco probable que pueda causar un daño a largo plazo en la audición de los consumidores", explicó.