El Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) señaló este fin de semana una serie de fallas e irregularidades en la investigación oficial sobre la desaparición y posible masacre de 43 estudiantes de Ayotzinapa, en el sur de México, que impiden dar por concluidas las pesquisas.
El 27 de enero pasado, Jesús Murillo Karam, fiscal federal, dijo que existe "certeza legal" de que los 43 jóvenes fueron asesinados e incinerados en un aislado basurero del municipio de Cocula, en el estado de Guerrero, entre la noche del 26 y el 27 de septiembre pasado.
"Se carece de evidencia científica para establecer que en el basurero existan restos humanos de los normalistas".
Sin embargo, el EAAF indicó en un informe difundido la noche del sábado, que de acuerdo a imágenes satelitales hubo varios incendios en el basurero de Cocula en los últimos cuatro años, por lo que interpretar el hecho "como un solo evento de fuego ocurrido, refleja una lectura parcial de la evidencia recolectada en dicho lugar", pues se "carece de evidencia científica" para establecer que en el basurero "existan restos humanos de los normalistas".
Error en 20 perfiles genéticos
Entre otros problemas de la investigación que fueron detectados por los peritos independientes, se alega que estos especialistas no estuvieron presentes en el momento en el que buzos militares localizaron en un río una bolsa con los 17 restos que fueron enviados a un prestigioso laboratorio de Austria para la identificación de los estudiantes, donde se consiguió dar los restos de Alexander Mora Venancio, uno de los estudiantes desaparecidos.
Los expertos denunciaron que 20 de los perfiles genéticos de 134 familiares de los estudiantes, que fueron enviados por la fiscalía al laboratorio de Austria, presentaban errores que afectaban a 16 familias de los 43 jóvenes. Además, pidieron a la fiscalía desestimar como evidencias 42 elementos balísticos y muestras de tierra recogidas sin su presencia y en un día en que el lugar no estaba custodiado por elementos de seguridad.
En base a 480 peritajes y una treintena de declaraciones de los más de 90 detenidos, la fiscalía dice tener "certeza legal" del asesinato e incineración en el basurero de Cocula de los 43 estudiantes para maestros rurales de Ayotzinapa.
Los jóvenes fueron brutalmente atacados el 26 de septiembre por policías del municipio de Iguala, vecino de Cocula, y entregados a miembros del crimen organizado que presuntamente los asesinaron.