El domingo pasado finalizó "Los 80". Por siete temporadas la serie de ficción emitida por Canal 13 retrató la vida de una familia de clase media durante esa década y terminó con el regreso de la democracia y la llegada de los años '90.
El Instituto Libertad y Desarrollo publicó un estudio en el que se compara la situación socioeconómica de familias similares a los Herrera López entre 1989 y 1990 con las condiciones actuales y estas son las mayores diferencias.
Más años de escolaridad
En 1990 los miembros de la clase media que rondaban los 50 años tenían 7,1 años promedio de escolaridad. Ese índice se elevó a un 9,8 años en 2011. En el caso de Félix y el resto de los chilenos entre 15 y 24 años el promedio de escolaridad se sitúa en un 11,5 años.
Vida más equipada
Si en 1985 los Herrera instalaron un teléfono fijo en su casa, en 2014 tendrían celular, computador y lavadora automática. Desde 1990 hasta hoy, la cifra de hogares con automóvil subió desde un 12,1% a un 26,2%.
Oportunidades de estudio
En 1990 el mayor de los Herrera, Martín, estaba entre el 10,4% de los jóvenes que cursaban estudios superiores, aunque tuvo que dejar la universidad para mantener a su hijo. Según cifras de 2011, un 26,3% de los jóvenes de la actualidad se están educando.
En la misma categoría estaría Claudia, que estudió medicina en la Universidad de Chile. El estudio destaca la caída de la tasa de fecundidad desde 2,4 a 1,9.
Doble ingreso
Los ingresos de los Herrera transformados en pesos de 2014 habrían promediado los $374 mil. Una familia de las mismas características hoy recibe un ingreso de $715 mil.
Casas y subsidios
El subsidio máximo al que se podía optar en 1980 era de 200 UF, mientras que en 2014, variando según la región, puede llegar a 700 UF. También han aumentado los hogares con electricidad (99,7% en la actualidad) y un 56,1% de ellos están pagados.
Participación femenina
El personaje de Ana mutó desde ser dueña de casa en la primera temporada, a convertirse en jefa de crédito de una multitienda hacia el final. La participación laboral de las mujeres del quintil 3 aumentó desde un 32,8% en 1990 a un 44,8%.