Rodrigo Tupper estuvo en Tele13 Radio conversando sobre sus proyectos luego de haber dejado el sacerdocio y que hoy lo tienen como gerente general de la Fundación Portas.
"Me toca harto estar en la calle y en general es una relación de mucho cariño. Es fruto de muchos años dedicado al sacerdocio. La gente sintió una entrega muy autentica a las labores que hice", comentó.
En este sentido, añadió que "hay muchos que me dicen padre, cura. Yo les digo que no se preocupen, que ya es como un apodo".
Sobre sus razones para dejar atrás el sacerdocio, cuenta que "habían razones personales, estrictamente vocacionales. Gracias a Dios no hubo motivos vinculados a lo afectivo o algún escándalo entremedio. No he querido ventilar, sino que hay cosas que quedan en la intimidad de uno, soy celoso de mi vida privada".
"El sacerdocio es una vocación de servicio, si hay cosas que no tienen para mi la fuerza de ese servicio uno dice que no, con transparencia y honestidad. Soy bueno para trabajar, para levantarme temprano, pero delante de ellos no puedo seguir en una cosa de la que no estoy convencido hoy día y seguir por miedo", remarcó.
Momento de la Iglesia
Otro tema abordado es el momento en que el se encuentra la Iglesia y la visión de los ciudadanos sobre ella.
A juicio de Rodrigo Tupper, "como católico hago un mea culpa de todas maneras, pero creo que todos los que tienen responsabilidad en la conducción de la iglesia tienen que hacérselo. Por algo hay un descrédito tan grande contra la Iglesia, por algo mucha gente se siente frustrada con ella".
"Creo que la Iglesia o muchas personas en la Iglesia han estado preocupados de temas que no son los más importantes para la vida de un creyente. Cuando se habla poco de Cristo, cuando se habla poco del evangelio y se habla mucho de temas que al final no son los más relevantes para el ciudadano, pasa eso, de que se hace irrelevante la vida de la fe", remarcó.
