En una entrevista con Tele13 Radio el senador y precandidato presidencial Manuel José Ossandón, se refirió al debate sobre los cambios a las leyes que regulan la inmigración. Todo esto, luego que la también posible carta de oposición, Sebastián Piñera, indicara que "muchas de las bandas de delincuentes que hay en Chile, como las que clonan tarjetas, son de extranjeros", sumándose a lo expresado antes por el propio Ossandón.
A juicio del parlamentario independiente (ex RN), es necesario regular la entrada de inmigrantes al país para que Chile no sea visto como "un lugar de puertas abiertas para quienes quieren delinquir".
"Felicito a Piñera por haber tomado una parte de la propuesta que hice la semana pasada que dije que cuando sea Presidente voy a frenar la inmigración ilegal", afirmó Ossandón.
Asimismo, agregó que Chile necesita migrantes, pero hay que organizarse para saber cómo recibirlos: "Lo que yo planteo es que los delincuentes que lleguen tienen que ser expulsados", señaló.
El senador añadió que en las ciudades limítrofes, como Arica, los peruanos cruzan a nuestro país por la playa y la policía, en vez de pedirles que se "devuelvan por donde entraron", los dejan una noche en un calabozo y posteriormente a un juzgado. "¿Qué pasa con ellos? en 24 horas los sueltan y se van a Santiago", expresó.
El legislador apunta a que el problema en este caso no es la policía, sino que la legislación que -según él- es muy permisiva: "A los que vienen a delinquir, hay que expulsarlos. No debemos permitir que vengan a aumentar los índices de delincuencia".
Vida en malas condiciones
Manuel José Ossandón indicó que "la idea es que podamos ayudar a los inmigrantes y recibir a quienes lo necesitan, pero en las condiciones que ellos llegan al país lo único que ocurre son abusos. Debemos establecer leyes claras, por ejemplo, que aquellos que tienen antecedentes no pueden entrar a nuestro país, ni siquiera como turistas. Lo anterior no es discriminación, es proteger a los ciudadanos".
El precandidato presidencial agregó que "queremos que esa gente que viene a trabajar a Chile, tenga un futuro mejor. La gente, por ejemplo, que está en la Plaza Yungay, vive en estos momentos en la iglesia del sector, la que está teniendo que hacerse cargo de más de 700 inmigrantes".
