Luego de tres meses de la aplicación de la regla de redondeo, se han recaudado más de 21 millones de monedas de $1 y $5, lo que equivale a 56 millones de pesos.
Claudia Bentjerodt, jefa del Departamento de Administración y Desarrollo de Circulante del Banco Central, señaló que es primera vez en el país que las monedas emitidas por un banco vuelven al mismo y no se mantienen en circulación.
Bentjerod explicó en Tele13 Radio que las monedas no desaparecen del mercado sino que se reemplaza por dinero de otras denominaciones, ya que éstas no pierden su valor. "Cada vez que alguien viene y entrega sus monedas de uno y cinco se le entrega el valor equivalente, ya sea en una moneda o un billete", señaló.
El Banco Central realizará una licitación nacional e internacional para llamar a las empresas que puedan estar interesadas en comprar estos metálicos, los cuales probablemente serán fundidos para reconvertirse en monedas de otros países o para la fabricación de partes metálicas.
Con esta licitación Chile percibirá algunos ingresos. Sin embargo -explicó la funcionaria- en lo que más beneficia este proceso al país es en el ahorro que genera dejar de acuñar este tipo de dinero.
"El costo de producción de estas monedas era muy superior al valor facial (real), y más aún si uno le agrega a esto los costos de almacenaje, de transportarlo a lo largo del país", afirmó Bentjerod. "Ese costo obviamente ya no lo vamos a tener que seguir asumiendo, va hacer una eficiencia a nivel país".