En la víspera de que la sala del Senado comience a votar este miércoles el proyecto de ley que despenaliza el aborto bajo tres causales (inviabilidad fetal, riesgo de la vida de la madre y violación), la ministra de la Mujer y la Equidad de Género, Claudia Pascual, dio detalles sobre el proyecto.
En entrevista con Mesa Central de Tele13 Radio, Pascual afirmó que el carácter "no disuasivo" del programa de acompañamiento que considera el proyecto siempre estuvo planteado de esa forma en el texto. "El acompañamiento tiene que ser voluntario y no tiene que obligar a la mujer a una decisión contraria a la que quiere", explicó.
Así, agregó que "el proceso de acompañamiento es para que tenga una asesoría (...) para acogerla cualquiera sea su decisión".
Pascual se refirió a las críticas de Fernando Chomali, arzobispo de Concepción que dijo en El Mercurio que el principio de no disuación era "propio de un Estado totalitario". En respuesta, la ministra dijo que esa visión no la compartía y que "como gobierno hemos planteado la opinión en el entendido de un programa de acompañamiento objetivo y respetuoso".
También insistió en que la despenalización del aborto "abre alternativas, no impone decisiones".
En esa línea, destacó que la objeción de conciencia ampliada que tiene el texto actual "no es institucional" ni a todo el personal de un determinado centro médico, "es sólo a los profesionales que participan en el pabellón del procedimiento".
La ministra detalló que el proyecto considera procedimientos diferenciados según la edad de las solicitantes. Las menores de edad tendrán que contar con autorización de los padres o representantes legales. Si hay una contradicción entre las partes, se recurre a tribunales que tendrán que resolver en menos de 48 horas.
A las mujeres entre 14 y 18 años se les pedirá informar a sus padres, tal como ocurre con procedimientos como la anticoncepción de emergencia. Finalmente, las mayores de 18 años podrán decidir con "autonomía plena".