La ministra del Trabajo, Ximena Rincón, puso en entredicho su asistencia al Te Deum ecúmenico  del 18 de septiembre, en medio de la polémica por la filtración de mails entre los cardenales Errázuriz y Ezzati. 

"No sé si voy a ir. Tengo que conversarlo con la presidenta", dijo. 

Esto en línea con lo señalado por lo presidentes de los cinco partidos de la Nueva Mayoría, quienes señalaron que no asistirán a la ceremonia. "Me resulta tremendamente doloroso lo que ha ocurrido", explicó la secretaria de Estado

Esto se da en medio de la polémica por la filtración de correos electrónicos entre los cardenales Francisco Javier Errázuriz y Ricardo Ezzati, donde mencionaban a Felipe Berríos y una gestión para evitar que fuera nombrado capellán de La Moneda, así como también pedían que Juan Carlos Cruz, víctima de Karadima, llegara a la comisión creada por el papa Francisco para la prevención de abusos sexuales a menores dentro de la Iglesia.

Paro aeronáutico

Respecto a la paralización de funcionarios de la DGAC y que mantiene cancelados los despegues desde varios aeropuertos del país, indicó que "es ilegal. Lo tendrá que ver el ministerio correspondiente y será analizado por el comité político". 

En este sentido, indicó que al ser una reinvidicación previsional y no salarial, el tema toma un ribete "complejo". 

Desempleo y Reforma Laboral

Otro aspecto abordado por la Ximena Rincón fue la situación económica y de desempleo en el país. La titular del Trabajo señaló se están tomando cartas en el asunto y que "la presidenta Bachelet nos ha convocado a una reunión para evaluar la situación"

En esta línea, señaló que pasarle la cuenta a la Reforma Laboral sobre la débil situación económica del país "es irresponsable". 

"Emprendimientos mineros han tomado decisiones muy drásticas, como por ejemplo la Minera El Abra. Le pregunté a los ejecutivos abiertamente si fue por la reforma laborla y me dijeron que no tenía que ver con eso, sino que era por la situación internacional y el bajo precio del cobre", indicó. 

Por otro lado, descartó divisiones al interior del Ejecutivo por la Reforma Laboral, y agregó que las indicaciones al proyecto de ley fueron concordadas con la Democracia Cristiana. 

"He visto la mejor relación entre Jorge Burgos y Rodrigo Valdés (...) Siempre se puede perfeccionar el proyecto, desde cosas de redacción hasta tener cuidado con la interpretación de los tribunales. Lo peor que podría pasar es que impere la soberbia", explicó. 

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