"Es una luz que irradia la humilde causa que nos queda pendiente", expresa Alicia Lira sobre la declaración ante la Justicia del exconscripto Fernando Guzmán, que identificó a sus superiores como autores del homicidio de Rodrigo Rojas De Negri y de las heridas que, de por vida, dejaron en Carmen Quintana, en el llamado Caso Quemados, ocurrido en la dictadura, el año 1986.
La presidenta de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos (AFEP) reitera lo que han expresado siempre sobre el supuesto 'pacto de silencio' que tiene el Ejército de Chile "de encubrir a los criminales, porque estos señores los mantuvieron permanentemente apoyados. El alto mando sabía quiénes eran (los autores del hecho)", y agrega que "la familia De Negri tuvo que esperar 29 años por una información que ellos tuvieron siempre".
Alicia Lira, asimismo, apunta directamente a los oficiales de la institución: "Hay una cosa muy relevante, que los peores crímenes que cometió el Ejército de Chile, dejando de lado a Carabineros o a las FFAA en su conjunto, han sido (de parte de) los oficiales, y la cobardía que ha mantenido el Ejército en vez de dignificar su honor".
Avanzar en las causas
Alicia Lira expresa que si bien no quiere victimizar a los conscriptos, "en todos los casos en que se ha sabido la verdad ha sido por algún conscripto o la larga lucha que han dado los familiares. Nosotros esperamos que sigan el ejemplo del señor Guzmán".
"Nuevamente le pedimos al Ejército que entregue la información a la Justicia para así avanzar en las causas", cierra la presidenta de la AFEP.
