Más que un debate, este jueves en redes sociales se vivió un festín de críticas hacia la producción televisiva del Festival de Viña del Mar por un hecho particular: la sensación de que durante el show de Jamiroquai se enfocaba más al público que a los músicos liderados por el vocalista Jay Kay.
Fanáticos con sombreros, los mismos dos niños bailando en repetidas ocasiones o al jurado y rostros de Chilevisión disfrutando de la música dejaban en segundo plano lo que estaba ocurriendo en el escenario.
¿Sabes quiénes se presentan hoy en el Festival de Viña del Mar?
Y el responsable de pinchar las cámaras, el director Álex Hernández, salió al paso de las críticas, asegurando que quiso "transmitir las sensaciones de la gente".
En entrevista con Emol, Hernández añadió que "lo que sucedió hoy día es que Jamiroquai tiene un público que obviamente lo quiere ver más a él".
Eso sí, no sugirió alguna autocrítica, sino al contrario: "Cuando llegaron las críticas, uno lo toma independiente de cómo venga escrito, uno lo toma como crítica, no como aporte". De todas formas, expresó que "lógicamente que tomamos unas medidas de bajar un poco la intensidad de lo que estábamos haciendo y ponerle un poco más al show porque la gente lo estaba pidiendo".