El parque de Reptiles Australiano de Somersby fue uno de los recintos que tuvo que cerrar sus puertas al público como medida de seguridad para prevenir los contagios de COVID-19 en el país.
Durante el periodo de confinamiento, el recinto aprovechó de realizar algunas obras de mantenimiento y un wombat fue trasladado al ambiente de un koala mientras limpiaban su hábitat.
Y durante el tiempo que compartieron, los cuidadores notaron la empatía y la buena química entre ambos y decidieron mantenerlos juntos durante el periodo de cuarentena.
Ahora, ambos son inseparables y entre ambos se saludan de besos, abrazos y caricias, un postal que en humanos, en estos momentos, parece imposible debido a las medidas de seguridad por el coronavirus, pero que recuerda valorar los gestos sencillos que nos alegraban el día.