La última versión del Boeing 787-9 ha sorprendido a muchos por sus capacidades, pues pese a ser un avión comercial -en tamaño y diseño- puede realizar maniobras como las de un caza de combate.
El avión apodado Dreamliner, fue probado por unos pilotos para determinar sus capacidades. Entre las que más llamaron la atención están su suave aterrizaje y un inusual despegue de casi 90 grados, pues la aeronave realiza por poco una forma vertical.
Pero no se asusten. Solo se trató de una prueba sin pasajeros. Por lo que la maniobra de despegue que realice normalmente este avión será como la de cualquier vuelo.
La nave -que tiene una capacidad de hasta 290 pasajeros- promete ser una de las mejores formas de volar, pues ofrece menores costos operacionales, mayor comodidad para los pasajeros e incluso un menor uso de combustible, lo que implica una reducción en sus emisiones de CO2.