La isla de Langeoog, ubicada en la costa en el mar báltico, vio su costa invadida por miles de cápsulas plásticas de colores que en su interior contenían pequeños juguetes de Kinder Sorpresa.
El buque Maersk Mukebo, de bandera danesa, portaba al menos cinco contenedores con las cápsulas de juguetes destinadas -al parecer- para huevos de chocolates Kinder Sorpresa rusos, ya que las instrucciones de los juguetes venían en el idioma de ese país.
Se cree que la ruta que iba desde Rotterdam a Bremerhaven se vio interrumpida probablemente por una tormenta causada por el ciclón Axel.
Apenas bajó la marea, padres y niños muy entusiasmados empezaron a recolectar los huevos. Acción que apoya el alcalde Uwe Garrels, ya que también se vieron piezas de Lego y otros envoltorios plásticos probablemente arrojados por el mismo barco, y que de no ser retirados pueden ser ingeridos por peces y otros animales marinos, provocando severos daños al ecosistema de la zona.
Muere italiano que inventó el huevo Kinder sorpresa