Un sacerdote brasileño fue agredido mientras dirigía una misa ante 50 mil personas que realizó en la ciudad de Sao Paulo.
El hecho ocurrió cuando Marcelo Rossi, un religioso gran popularidad en dicho país, se dirigía a los fieles en la misa de clausura del campamento "Not Today", momento en que una mujer burló la seguridad, subió al altar y empujó por la espalda al sacerdote, quien cayó desde el escenario provocando los gritos de los asistentes.
Tras la agresión, que quedó grabada por la transmisión del evento, la mujer fue detenida por la policía militar. Posteriormente, se dio a conocer que la responsable había viajado desde Rio de Janeiro para estar en el lugar y que sufriría de trastornos mentales.
A pesar de la fuerte caída, Rossi no sufrió heridas de consideración y tras ser revisado por personal médico, volvió a subir al altar para terminar la ceremonia. Una vez terminada la actividad se refirió al incidente a través de un video publicado en el Twitter de la congregación Cooperadores da Verdade, donde aseguró que estaba todo bien.