Expertos entregaron una serie de recomendaciones en relación el buen dormir en medio de bajas temperaturas.
Y es que el fin del otoño y la cercanía del inicio del invierno hacen que las personas recurran a diversos mecanismos para abrigarse.
Sin embargo, advierten que el dormir muy arropados, usar guatero o mantener prendidos aparatos como calentadores de cama o estufas, en exceso, podría afectar al descanso producto de sudoraciones nocturnas.
El neurólogo de la Clínica Somno, Álvaro Vidal, precisó que "es un error habitual pensar que mientras más temperada esté la pieza para dormir, es mejor, dado que durante el sueño la temperatura del cuerpo no es estable, sino que varía por ciclos y se regula por un ritmo circadiano".
"Al caer la luz del día, cercano a las 10 u 11 horas, nuestra temperatura externa sube medio grado, induciendo el sueño y manteniéndolo durante la noche, lo que luego se revierte al amanecer donde baja nuevamente para que podamos mantenernos despiertos", agregó.
Por lo mismo, la recomendación es mantener la pieza y cama a una temperatura de entre 15°C a 22°C ambiente, que es lo ideal para descansar cómodamente.
"La temperatura de nuestra piel debe estar alrededor de los 36°C para que durmamos bien, lo que se logra sin abusar de métodos de calefacción como calientacamas y guateros para combatir el frío", agregó el neurólogo Álvaro Vidal.
En esa línea, desde Clínica Somno se entregaron una serie de recomendaciones:
- Para regular la temperatura del cuerpo antes de irse a dormir: Una ducha tibia.
- Ventilar la habitación por unos minutos para permitir cambios de aire y evitar la humedad.
- Tratar que la tela del pijama y la ropa de cama sean de algodón, pues disminuyen la posibilidad de sudoraciones desagradables.
- Si bien no existe consenso científico de si es mejor o no dormir con calcetines, la recomendación es que si se sufre frío especialmente en los pies sí se recurra a ella.
- Apagar calefacción previo a dormir, ya que a mayores temperaturas es más difícil conciliar el fuego.
- Evitar realizar actividad física en las últimas horas del día, porque si se hace de noche se irá a la cama con temperatura del cuerpo algo elevada puede dificultar la conciliación del sueño.