El artista urbano chileno Marcianeke volvió a realizar trabajos en su automóvil de lujo, a unas pocas semanas de haberlo pintado fucsia. En esta ocasión, por culpa de un "topón".
Se trata de su Porsche Cayenne Turbo, el cual tomó notoriedad recientemente por haberlo pintado de color fucsia, abandonando su original negro. El vehículo lo había adquirido a raíz de su intensa alza al éxito en el ámbito musical, pues es una de las principales figuras de la música urbana en el país.
El dueño del taller mecánico Auto León, Eugenio Manquián, había manifestado que "la carrocería presentaba daños, el auto en sí no estaba del todo bueno. Creo que Marcianeke sabe mucho de música, pero no sé si tanto de autos... es como que vio, pagó y se lo llevó, porque el auto tenía hartos detalles, hasta le faltan detallitos que tendrá que pedir el extranjero".
Sin embargo, a semanas de haberse registrado esa intervención, el vehículo volvió a las manos del mecánico.
Según recogió LUN, Matías Muñoz —nombre real del cantante de 19 años— chocó contra un pilar en un estacionamiento, lo que provocó daños a la pintura del área derecha del automóvil.
"Pasó a llevar el Porsche Cayenne en un estacionamiento contra un pilar me llamó altiro para andar con el vehículo impecable", relató y se precisó que los montos sobre los trabajos iniciales ascendieron a un total de $1,8 millones de pesos.
Por lo pronto, Eugenio Manquián no pudo precisar cuánto podría demorar el nuevo trabajo en el Porsche.
