Los padres de Henry, un niño de cinco años, pasaron un gran susto luego de pasar sus vacaciones en un resort de Cancún, México. 

Según informa Daily Mail, Amy y Matt Parkin-Low padres de Henry, no suelen permitirle a sus hijos (3) consumir dulces o cosas azucaradas, sin embargo, como estaban de vacaciones, les permitieron probar unas paletas de helado sabor limón preparadas por personal del resort y que no contenían más que ingredientes naturales.

Fue en ese momento que notaron que Henry tenía salpicaduras y manchas rojas en su boca, las cuales, posteriormente se trasformaron en ampollas.

En un principio los padres pensaron que era fiebre aftosa, sin embargo, con el paso de los días la situación empeoró, haciendo que las marcas se enrojecieran y ardieran.

Amy y Matt no lograron comunicarse con el médico de la familia local, por lo que la madre comenzó a investigar de qué podría tratarse lo que tenía su hijo.

Fue así que descubrió que Henry estaba sufriendo el inicio de una extraña condición llamada "fitofotodermatitis" la cual se produce por una reacción química entre la luz del sol, ciertos productos químicos de las plantas (generalmente limas) y la piel.

La fitofotodermatitis afecta a 16 de cada 100 mil personas y en los casos más extremos, los pacientes pueden desarrollar infecciones bacterianas y fúnicas graves, e incluso, requerir internación hospitalaria para tratar la piel infectada y prevenir cicatrices permanentes.

Fue así que Amy y Matt llevaron a su hijo a un farmacéutico en México, quien les dio una crema antibiótica, sin embargo, una vez que volvieron a casa, el médico de cabecera les recetó una crema con esteroides.

El niño todavía tiene manchas rojas en la boca y siente dolor, sin embargo, el pediatra les dijo que las marcas desaparecerían en unos dos meses.

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