Un perro, llamado Nerón, falleció 15 minutos después que su dueño, Stuart Hutchison, perdiera la vida tras padecer un tumor cerebral. Según contó la familia del joven de 25 años, el animal murió el mismo día que su amo y con unos pocos minutos de diferencia.
Hutchison tenía tres mascotas, sin embargo, “Nerón y él eran como uno solo”, dijo Fiona, la madre del joven fallecido al medio Daily Star. “Nerón era el perro que siempre estaba con él”, agregó la mujer.
El joven escocés fue intervenido quirúrgicamente y asistió también a quimioterapia, sin embargo, nunca pudo superar el tumor que arrastró durante siete años y falleció el 11 de agosto en su casa.
"Llevamos a Stuart a casa hace cuatro semanas porque quería morir en su casa, porque allí nació. Lo cuidamos en casa, esperábamos que se recuperara, pero era difícil”, contó su madre.
"En junio, comenzó a afectar todo su brazo y fue cuando hicieron una exploración y vieron que el cáncer se había apoderado de todo su cerebro y se había extendido a los huesos y la pelvis”, agregó.
La muerte de Nerón en cambio fue más bien imprevista pues, según contó la familia, el perro no padecía una enfermedad declarada y sus dueños lo llevaron al veterinario porque parecía estar enfermo.
En urgencias, los profesionales detectaron un grave problema en la columna de Nerón, que perdió la vida pocos minutos después, al igual que su dueño.
