Luego de correr la Maratón de Santiago es posible que aparezcan ciertos dolores musculares y articulares. Para alguien que no esté preparado, distinguir entre uno y otro puede ser incluso un desafío.
Mientras que las molestias musculares se concentran en una zona generalizada del cuerpo, los dolores articulares se producen en un punto fijo que, por lo general, suelen ser los tobillos o las rodillas. Las dolencias musculares, en cambio, se pueden identificar tocando un punto cualquiera de la parte que duela.
Reconocer entre un dolor y otro es primordial para saber qué tratamiento llevar. Christian Galaz es kinesiólogo y master en medicina y ciencias del deporte y en conversación con T13.cl cuenta que "para los dolores articulares lo ideal es aplicar frío en la zona afectada por 15 minutos aproximadamente".
Para las dolencias musculares es todo lo contrario: aplicar calor. "En lo que es la parte muscular, que es propia de una carrera, se recomienda poner calor. Para relajar la musculatura, para que llegue más sangre y, en general, se da por un tema de fatiga o agotamiento", dice.
Además del calor, el especialista recomienda elongaciones para aliviar el dolor muscular y sesiones de ejercicos aeróbicos de muy baja carga. "El fin de este ejercicio es vascularizar, es que recircule nuevamente la sangre a través del músculo para que se recupere", agrega.
ALIMENTACIÓN E HIDRATACIÓN
Una buena técnica para saber el gasto de energía es pesarse antes y después de la carrera. Al notar la cantidad de gramos o kilos perdidos se sabrá cuánta agua se perdió en la corrida. De esta forma se puede saber la mejor forma de hidratarse.
De no haberlo hecho, el kinesiólogo de Rehabilita recomienda dosificar la hidratación y "no volverse loco tomando bebidas hidratantes o isotónicas porque también puedes generar malestar estomacal. Por lo menos un litro cada dos horas".
En cuanto a la nutrición, agrega que se debe evitar el consumo de grasas previo a una carrera, ya que éstas demoran en ser absorbidas por el cuerpo y con ellos se ralentiza la hidratación.
Por último, agrega que los dolores lumbares deben ser tratados aplicando calor en la zona por 15 minutos. De no irse el dolor en un plazo de tres a cuatro días, lo mejor es consultar a un especialista.
"Si hay dolores más graves, verlo con un especialista con imágenes. Si el dolor persiste y no cede con estas medidas, siempre es bueno consultarlo con un especialista", finaliza.
Finalmente, un baño de agua caliente al día siguiente ayudará a que la musculatura se descontracture.
