Dos militantes ecologistas pegaron sus manos el sábado en el marco de dos pinturas de Goya en el Museo de Prado de Madrid, para denunciar la falta de acción de las autoridades frente al calentamiento global, indicó la policía española.
Las dos militantes no dañaron los cuadros, pero pintaron "+1,5°C" en el muro entre las dos pinturas, en referencia al objetivo de calentamiento con el que se comprometió la comunidad internacional. Las dos personas fueron detenidas, según la policía.
En un video subido a internet por Extinction rebellion, colectivo ecologista adepto a la desobediencia civil, se ve a las dos activistas con una mano cada una pegada a una pintura en una de las salas del museo, antes de ser detenidas por responsables de seguridad del museo.
Según Extinction rebellion, las dos pinturas en cuestión son "La Maja desnuda" y "La Maja vestida", de pintor español Francisco de Goya (1746-1828).
Esta acción es una "señal de protesta" frente al "aumento de la temperatura mundial, que va a provocar un clima inestable con graves consecuencias en todo el planeta", subraya el colectivo en un comunicado.
Militantes ecologistas han organizado acciones espectaculares de ese tipo en varios países de Europa contra pinturas importantes realizadas por maestros de la talla de Leonardo da Vinci, Claude Monet, Vermeer y Van Gogh.
En octubre pasado, el grupo Just Stop Oil! arrojó sopa de tomate sobre los "Girasoles" de Van Gogh en la Galería Nacional de Londres.
La pintura, que estaba protegida por vidrio, no sufrió daños.
El viernes, militantes en Roma arrojaron sopa contra un Van Gogh protegido por un vidrio.