En 2015, la escritora de cuentos infantiles, Amy Krouse Rosenthal, fue diagnosticada con un cáncer terminal. Luego de dos años de lucha -y con los días contados-, Amy decidió embarcarse en una última misión: encontrarle una nueva pareja a su marido.
Para esto, la escritora publicó una columna en el diario estadounidense New York Times, que tituló como "Deberías casarte con mi esposo" y en la que da más de una razón de por qué su esposo merece un nuevo amor.
"Llevo un tiempo intentando escribir esto, pero la morfina y la falta de hamburguesas jugosas (creo que ya van cinco semanas sin comida de verdad) me han dejado sin energía y han interferido con lo que me queda de capacidad de prosa", escribe al comienzo del texto.
"He estado casada con el hombre más maravilloso durante 26 años. Planeaba que fueran al menos 26 años más", sigue.
Más adelante, la escritora describe los buenos momentos que pasó junto a su marido, Jason, y enumera todas las características que lo llevaron a enamorarse de él y que piensa que le gustarán a otras mujeres. Para esto realiza un "perfil de citas" tal como se utilizan en algunas aplicaciones online.
"Empecemos por lo básico: mide 1,78 metros, pesa 72 kilos, tiene ojos color avellana y cabello entrecano", escribe.
Más adelante, Amy afirma que a Jason le encanta hacer ejercicio y que está completamente en forma.
En cuanto a otras habilidades, la escritora describe a Jason como un buen cocinero, amante de la música y la pintura. Además, admite que es muy amoroso y detallista.
"Este es el tipo de hombre que es Jason: llegó al ultrasonido de nuestro primer embarazo con flores. Es el tipo de hombre que, ya que siempre se despierta temprano, me sorprende los domingos en la mañana al hacer caritas felices con algo que se encuentre cerca de la cafetera: una cuchara, una taza, un plátano", agrega la mujer.
Al final del texto, Amy admite su deseo de tener más tiempo con Jason y sus hijos, pero sabe que eso no va a suceder. Por eso pide a las mujeres que no lo piensen dos veces y vayan en busca de su marido.
"Terminé de escribir esto en el Día de San Valentín, y el regalo más genuino (que no sea un jarrón miniatura) que puedo esperar darle es que la persona apropiada lea esto, busque a Jason y empiece otra historia de amor".
"Dejaré este espacio en blanco a propósito, para que tú y él puedan tener el nuevo comienzo que merecen", escribe al final de la carta.
