Durante noviembre fue que las Spice Girls mostraron su lado más caritativo al prestar su imagen y su nombre para poner en marcha una campaña solidaria con el objetivo de recaudar fondos y donarlos a la organización Comic Relief y su programa Gender Justice.
Se trataba de poleras blancas impresas con el hashtag #IWannaBeASpiceGirl con el fin de luchar por la defensa de los derechos de las mujeres y las niñas, y a la lucha contra la violencia de género y la explotación. Sin embargo, una investigación de The Guardian tiene a esta campaña en medio de la polémica.
De acuerdo a este medio, las poleras se realizaron en una fábrica de Bangladesh que ha sido denunciada por algunas de sus trabajadoras por explotación laboral. Ahí las mujeres ganan el equivalente a 298 pesos chilenos por hora durante los turnos en los que dicen ser acosadas.
Junto a los malos tratos verbales por parte del jefe de la fábrica, la investigación reporta que las empleadas deben desempeñar turnos de más de 16 horas.
Y, además, la investigación revela que, hasta el momento el dinero recaudado no habría llegado a las fundaciones.
En noviembre, al lanzar la campaña, las Spice Girls afirmaron que "la igualdad y el movimiento del poder de las personas siempre han estado en el corazón de la banda".
Ahora, consultadas sobre la polémica, un portavoz aseguró al mismo medio que estaban "profundamente conmocionadas y consternadas". Junto con esto, afirmaron que realizarán una investigación sobre las condiciones de las trabajadoras.