Representantes chilenos en el mundo del espectáculo internacional hay muchos, sin embargo, en el área del modelaje es difícil encontrar un nombre, sobre todo masculino.
Eso hasta ahora, ya que Jhonatan Mujica ha logrado ganarse su lugar en las pasarelas italianas tras modelar para conocidos diseñadores, entre ellos la casa de moda Dolce & Gabbana.
El chileno, que también tiene sangre venezolana y es primo de la cantante que se hizo conocida en “Rojo”, Christell Rodríguez, fichó para una agencia de modelos a sus 20 años y su vida cambió para siempre.
Comenzó su carrera en este rubro en Buenos Aires, Argentina, a los 20 años cuando era personal trainer y estudiaba medicina. Pero antes, estuvo un año en Chile estudiando kinesiología.
“A los 19 años, después de estudiar un año kinesiología en Chile, decidí estudiar medicina en Buenos Aires. La agencia EP Bookers me escribió por Instagram preguntándome si quería ser modelo", comentó a LUN.
Y agregó: “Acepté a tomarme fotos, pero mi vida no cambió. En esa época, además de estudiar, estaba trabajando de personal trainer. No paraba en todo el día y estaba con mucho estrés. En seis meses bajé 23 kilos, de 95 a 72. La agencia me llamó para renovar mis fotos, pero yo no quería”.
Lo anterior, porque le daba vergüenza verse tan flaco ya que antes era más musculoso. “Acepté porque insistieron, pero les advertí que pronto volvería a ser el mismo. Cuando me vieron, les gustó. Me dijeron estás perfecto y tenían razón porque todo cambió en 180 grados”.
Una de sus grandes oportunidades llegó de la mano de Domenico Dolce, diseñador italiano y uno de los fundadores de Dolce & Gabbana. “Me fui a vivir a Milán y conseguí un desfile con Dolce & Gabbana. Llegué 15 minutos tarde para el fitting (prueba de vestuario) y mi agencia me llamaba y me llamaba y yo muy tranquilo pensando cuál es el problema si hay otros 150 modelos”.
Pero Mujica nunca imaginó lo que en realidad le esperaba tras ese retraso. “Ellos [agencia] alarmados me dijeron no puedes llegar ni un minuto tarde, aunque yo sentí que le estaban poniendo color. Cuando llegué, no pasé inadvertido (…) Fui el único modelo que ubicaron en un rincón mientras los otros estaban en una fila. Cuando me estaban acomodando el traje que usaría un señor me agarró del traje, me miró de frente y dijo ‘tú no llegas tarde nunca más, ¿entendiste?’ Y yo como ‘sí, perdón, no fue mi intención’”.
Lo que no sabía Jhonatan era que el reto había sido del mismísimo Domenico Dolce (uno de los fundadores de la lujosa marca). “Desde ese día hasta hoy sigo trabando para ellos. Ya llevo ocho desfiles, una campaña y me invitaron a su fiesta de fin de año (…) Cada vez que lo veo, me dice hola, españolote, veo que hoy no llegas tarde”, cerró.
