Jamie Foxx continúa recuperándose en el centro hospitalario de Georgia, Estados Unidos, en el que fue ingresado después de que tuviese que ser trasladado de urgencia el pasado 12 de abril por una "complicación médica" mientras se encontraba en pleno rodaje de su última película para Netflix, 'Back In Action'.
Una vez allí, se le han realizado todo tipo de exámenes médicos, aunque su estado empeoró, llegando incluso a tener que ser "resucitado" en un momento dado. Sin embargo, parece que va mejorando, porque el actor ya ha dado señales de vida en redes sociales, donde ha agradecido a todos sus seguidores el cariño y apoyo recibido durante todos estos días.
"Aprecio todo el amor, me siento bendecido", señaló seguido de varios emojis de manos en oración, un corazón y un zorro.
La estrella también quiso dar las gracias a su amigo Nick Cannon, quien lo ha reemplazado como anfitrión del programa musical 'Beat Shazam'. La hija de Jamie, Corinne Foxx, de 29 años, ejerce de DJ en este mismo espacio, pero también se tomará un descanso para ayudar a su padre a recuperarse.
Según informaciones del portal Radar Online, al parecer el estrés habría sido el causante de una gran crisis que habría provocado que se disparara su presión sanguínea, "culpable" de su complicación médica. Para los médicos que tratan su caso, según el citado portal, Foxx tiene "suerte de estar vivo".
Actualmente, el actor se encontraría "despierto y alerta", mejorando y recuperándose, según estas fuentes.
