Diariamente son millones los videos que aparecen en las distintas redes sociales. Cada uno más impresionante que el anterior, por lo que a veces cuesta distinguir entre la realidad y la ficción.
Aprovechándose de eso, la productora The Woolshed Company ha logrado alcanzar a millones con sus videos increíbles: una mujer que practica snowboard sin percatarse que la está siguiendo un oso, un joven que persigue a un tornado para sacarse una selfie o el de un grupo de cazadores que se fotografían junto a un oso muerto, antes de ser perseguidos por el resto de la manada.
Lo que sí es cierto, es que todos son videos falsos, pero que en algún momento lograron capturar a la audiencia hasta que alguien se percató de que eran historias fabricadas.
En dos años el estudio independiente estudió el comportamiento de los videos virales. Y en ocho grabaciones que componen The Viral Experiment, han logrado 205 millones de reproducciones.
La compañía australiana quiso crear y distribuir piezas audiovisuales que fueran entretenidas para el público, pero sin tener que contar con campañas publicitarias.
Cuando los videos eran replicados en los medios de comunicación, la mayoría de las veces era con la pregunta si es que se trataba de realidad o ficción. De hecho, ese debate fue el que disparaba la viralidad, según señalan desde el programa The Viral Experiment.
"Hemos aprendido que el contenido visual es otra forma de entretenimiento, así que cada video necesita de un concepto narrativo clásico, que incluya principio, nudo y desenlace" comentó al medio español Verne uno de los responsables de la compañía.
De hecho, arriba de cada video aparecía una pregunta: "¿Real o falso?". Al hacer click ahí se redireccionaba a la web oficial del proyecto.
