Ernesto Galiotto es un ecologista brasileño quien protagonizó uno de los videos más raros del último tiempo. Y es que el hombre se encontraba realizando fotografías aéreas en playa de Peró en Cabo Frío, en la Región de los Lagos de Río de Janeiro y cuando sacó su celular, éste salió volando, literalmente.
Ernesto llevaba consigo dos cámaras réflex para tomar imágenes del sector costero, equipos debidamente protegidos con la cinta al cuello, pero también decidió grabar en video algunas tomas con su teléfono celular. Allí fue cuando todo se tornó en un chascarro.
Y es que el fotógrafo se confió al momento de sacar su equipo móvil por la ventanilla de la avioneta en la que viajaba, puesto que en cuestión de segundos se le soltó el móvil de la mano y cayó desde 300 metros en 15 segundos.
Una caída importante, donde Galiotto pensaba que había perdido el equipo, sin embargo gracias al GPS del equipo lo pudo recuperar. Y al encontrarlo la sorpresa fue mayor, ya que el teléfono se encontraba sin desperfectos en su pantalla, y además había grabado toda la caída.
Luego de que iniciara los movimientos para dar con el paradero del equipo, Ernesto lo ubicó a 200 metros del agua, posado en la arena. “Creo que el sol lo ha recargado porque cuando llegamos a recuperarlo al día siguiente, todavía tenía un 16% de carga”, indicó el afortunado dueño de este teléfono a Globo.
Una anécdota interesante para Ernesto Galiotto, quien ha recibido miles de visitas en su canal de YouTube.