Un pingüino fue liberado tras pasar dos meses en recuperación luego de que nadara más de 2.500 kilómetros entre Nueva Zelanda y Australia.
Los 2.500 kilómetros es equivalente a nadar la distancia entre Arica y Los Ángeles.
El animal fue encontrado el pasado 10 de julio, agonizando en las cercanías de Melbourne por un grupo de veterinarios, quienes lo trataron en el zoológico de la ciudad durante cuatro semanas.
El ave pertenece a la especie Fiordland (Eudyptes pachyrhynchus), que se encuentra en estado de conservación vulnerable.
“Realmente aumentó mucho de peso aquí. Una vez que se puso en marcha, acumuló el peso, un gran apetito. Estaba comiendo un 20-25 por ciento de su propio peso corporal por día”, explicó Michael Lynch, jefe veterinario. Lo anterior es equivalente a que una persona de 80 kilos consuma 20 de comida al día.
Cuando el ave estaba más repuesta para nadar, "empezamos a reintroducirlo al agua para ayudarlo a aumentar su masa muscular" para que pudiera aguantar el viaje de vuelta a Nueva Zelanda, comentó Lynch.
Posteriormente, le pusieron un chip y lo liberaron en la costa australiana para que comenzara su largo retorno a casa.