Taylor Swift ha remecido a la industria musical con un potente alegato contra Scooter Braun, el poderoso mánager de Justin Bieber y Ariana Grande, al acusarlo de quedarse con los derechos de su música sin siquiera haberle dado la oportunidad de ofertar por su catálogo.
El manejador de las estrellas del pop compró por US$ 300 millones a Big Machine Label Group, la antigua disquera con la que la estadounidense trabajó en el pasado.
"Este es Scooter Braun, acosándome en las redes sociales cuando estaba en mi momento más bajo. Está a punto de quedarse con toda la música que he hecho", asegura Swift en un post de Tumblr, añadiendo que está "triste y asqueada" con el tema, ya que lleva años intentando recuperar los derechos comerciales de sus canciones.
"Durante años he pedido, he rogado, una oportunidad para poseer mi propio trabajo. He tenido que tomar la horrible decisión de elegir y dejar atrás mi pasado. La música que escribí en el suelo de mi habitación y los vídeos con los que soñe, que pagué de mi dinero, del que gané tocando el bares, después en clubes, después en salas, después en estadios", añade la mujer de "Wildest dreams".
De hecho, Taylor Swift acusa a Braun de haber ejercido "acoso" y "manipulación" durante años.
En contraparte, Big Machine Label Group envió una declaración a la revista People donde expresan que la artista y su padre ya sabían la noticia; y que "Scooter siempre ha apoyado, apoyará y custodiará de forma honesta a Taylor y su música".
Sin embargo, artistas como Rihanna, Nicki Minaj o Lana del Rey, entre otras, han entregado su apoyo a Swift de distinta forma.
Bieber, en tanto, publicó un mensaje donde asevera que "creo que el único modo de resolver los conflicos es mediante la comunicación. (...) Estoy convencido de que Scooter y yo querríamos hablar y resolver cualquier conflicto, dolor o sentimientos que tengan que explicarse. Ni Scooter ni yo tenemos nada negativo que decir sobre ti y te deseamos lo mejor
