El tercer episodio de la sexta temporada de "Game of Thrones", "Oathbreaker", estuvo marcado por el regreso a la vida de "Jon Snow" (Kit Harington), así que si alguien aún no ha visto el capítulo, mejor que no siga leyendo las próximas líneas.
Después de que "Melisandre" (Carice van Houten) lograra revivir al mencionado personaje, éste explicó que luego de haber sido apulañado y haber despertado ahora, no sintió "nada".
Posterior a aquello, "Snow" tuvo un breve encuentro con sus hombres, quienes lo recibieron con alegría y hasta tirándole una broma sobre el tamaño de su aparato reproductor tras haberlo visto muerto y desnudo.
Además, "Jon" fue considerado un Dios por su inesperado regreso. Sin embargo, lo más relevante de su retorno fue que este papel cobró venganza de quienes lo traicionaron y de los que habían acabado con su vida: los cuatro grandes traidores del "Lord Comandante" murieron ejecutados en la horca.
Entre ellos, estaba el "pequeño Olly" (Brenock O'Connor), quien comenzó la serie siendo su protegido, aunque más tarde se convirtió en su principal enemigo. Fue justamente el niño quien apuñaló a "Jon Snow", causándole la muerte al final del quinto ciclo de "Game of Thrones".
El tercer episodio de la sexta temporada de la serie de fantasía medieval culminó con el rol de Kit Harington dejando para siempre la Guardia de la Noche, la cual había terminado para él tras haber muerto.
Cabe destacar que otro de los puntos importantes de la última emisión de la producción de HBO también fue que "Arya Stark" (Maisie Williams) terminó su aprendizaje y recuperó la visión.