"No tuvieron noticias de nosotros porque no hicimos nada", dice Roldán González Rivero. El líder de Orishas responde a los cuestionamientos con la misma sinceridad con que la agrupación cubana decidió darse una pausa de una o dos temporadas, después de diez años trabajando juntos: "Cada uno tenía su caprichito musical personal y esa pausa se estiró y duró 7 años". Ruzzo se fue a vivir a Pamplona, Yotuel viaja entre Madrid y Miami, y el propio Roldán reside con su familia en París. Pero esa ruta trazada casi plenamente hacia el continente europeo terminó por reunirlos.

"Es el renacer desde las cenizas, como el ave fénix. Las influencias musicales son otras, las temáticas, la madurez, en siete años pasaron muchas cosas", dice el compositor. Una vuelta al juego que los traerá nuevamente a Chile el sábado 15 de abril, como número principal del festival SurfBeats —en el Fundo El Manzano de Pichilemu—.

Pero también un segundo tiempo en el que tienen como rival a su propia historia.

"Estamos haciendo un álbum bonito. Y tenemos un poco de presión porque después de siete años no creo que un grupo como Orishas pueda permitirse sacar un disco mediocre, tenemos que estar muy serios con eso. Lo último que queremos es decepcionar a nuestros fans", asegura Roldán.

Al menos, los seguidores del conjunto formado en 1999 ya pudieron conocer el primer adelanto de su próximo trabajo.

Durante 2016, en colaboración con Gente de Zona y otros compatriotas, el trío lanzó "Cuba isla bella", que será uno de los nuevos sencillos que Orishas presentará en el evento que tiene a Cultura Profética y Ana Tijoux como máximos exponentes.

"Tenemos varios inéditos en el repertorio, pero como no tenemos el disco listo, estamos intentando recorrer diez años de carrera musical. Desde 'A lo cubano' hasta 'Cosita buena'. Hacer la mayoría de los sencillos que gustaron mucho a nuestro público para ir calentando los corazones y después atacar con el nuevo disco, con tres o cuatro temas inéditos que ya estamos haciendo en directo", cuenta Roldán, antes de adelantar cómo será el sucesor de "Antidiotico" (2007), su última placa de grandes éxitos.

"Queríamos hacer un proyecto al que pudiésemos dar un toque particular. Hay una cosita ahí que hay gente que no logra encontrar y nosotros creo que lo logramos haciendo esta mezcla de rap con música tradicional cubana. Seguimos en la misma línea porque no podemos cambiar eso, somos una marca", termina el líder del conjunto.

Publicidad