El fin de semana recién pasado se realizó la millonaria boda del capitán del Real Madrid, Sergio Ramos, y de la animadora y actriz española Pilar Rubio, en la finca del futbolista llamada "La Alegría".
Todo fue galmour en el millonario evento, donde asistieron varias celebridades como David y Victoria Beckham. Sin embargo, una empleada que trabajó durante el festejo reveló detalles inéditos de lo que vivió.
La mujer, que no quiso dar su nombre, fue entrevistada en el programa español "Sálvame" y se descargó contra los supervisores que organizaron y se encargaron de los servicios de la fiesta del matrimonio.
"El equipo de trabajo, fatal. Pagan diez euros la hora (7.800 pesos chilenos aproximadamente)", aseguró la empleada, que también se quejó por promesas incumplidas: "Ellos dijeron unas cosas que después no se cumplieron, como que nos iban a llevar en unos vehículos" hasta la finca.
De acuerdo a lo consignado con ABC.es, tanto ella como los otros trabajadores tuvieron que arreglárselas para llegar al lugar y luego para devolverse a sus casas. Además, la mujer hizo hincapié en la forma que utilizó uno de los supervisores que trabajaba en la fiesta. "Me trató como a un perro", dijo.
Asimismo, contó que los empleados, tanto hombres como mujeres, debían cambiarse de ropa en una misma carpa: "Estábamos allí todos desnudos, una vergüenza… era la primera vez en mi vida que trabajaba en esas condiciones".
Por otro lado, comentó que los trabajadores pasaron muchas horas sin comer y cuando pudieron hacerlo fue cerca de las tres de la mañana y tuvieron que conformarse con las sobras que dejaron los invitados.
Algo que dejó en claro la denunciante, fue que todos los malos tratos recibidos fueron por parte de la organización y no de los recién casados: "Si lo hubieran sabido [Sergio y Pilar], no creo que lo hubieran permitido", aseguró.
Finalmente, también detalló que tuvo que firmar un "contrato de confidencialidad", en el que se establecía una multa de 100 mil euros en el caso de que filtraran imágenes de toda la fiesta.