Por AFP

Repleta de deudas y blanco de decenas de demandas judiciales, The Weinstein Company (TWC), la productora fundada por Harvey Weinstein y su hermano Robert, afirmó que no tiene "más remedio" que declararse en bancarrota tras el colapso de negociaciones para la venta de la compañía a un grupo de inversores.

La compañía cayó en picado desde que empezaron a conocerse en octubre las denuncias de acoso sexual, abuso e incluso violación de más de un centenar de mujeres contra Harvey Weinstein, cuyas películas recibieron más de 300 nominaciones al Oscar y 81 estatuillas.

TWC dijo que fracasó en alcanzar un acuerdo con el consorcio liderado por Maria Contreras Sweet, una exfuncionaria del gobierno de Barack Obama, por un supuesto monto de 500 millones de dólares.

"Me sorprendí al leer en una publicación una carta de representantes de la TWC sobre el fin de nuestras negociaciones", aunque "parecía que estábamos próximos a concluirlas en un par de días", dijo Contreras Sweet a la prensa estadounidense.

"Lamentablemente, parece que esta transacción ha terminado ahora", añadió.

Fuentes cercanas a las negociaciones sugirieron no obstante que aún es pronto para dar por muerta la negociación.

En una carta de dos páginas dirigida a Contreras Sweet el domingo, representantes de la productora dijeron que no tenían "más remedio" que declarar la bancarrota.

Temiendo que la venta de la productora dejara a las víctimas sin la indemnización adecuada y perpetuase al actual directorio en la empresa, el fiscal de Nueva York Eric Schneiderman demandó a la compañía a comienzos de mes.

Schneiderman dijo que cualquier negocio debía contemplar una indemnización adecuada para las víctimas, proteger a los empleados y remover a los ejecutivos que hicieron la vista gorda a los abusos de Weinstein durante años.

La productora se queja de que el consorcio no respetó su parte del acuerdo en relación a las condiciones señaladas por el fiscal general, ni puso a disposición fondos para mantener a los empleados ni las operaciones del día a día antes de que la compra finalizase.

"Si bien lamentamos profundamente que sus acciones hayan llevado a este resultado desafortunado para nuestros empleados, nuestros acreedores y cualquier víctima, ahora buscaremos la única opción viable de la junta directiva para maximizar el valor restante de la compañía: un proceso de bancarrota ordenado", se lee en la carta a la que accedió la AFP.

Millones para las víctimas

"En los próximos días, la compañía preparará su declaración de bancarrota con la meta de lograr su máximo valor en tribunales", sostuvo la productora en un comunicado.

El despacho del fiscal general dijo que estaba "decepcionado" con la posición de TWC cuando llegó a existir "un claro camino" para cumplir sus condiciones, incluido un compromiso del comprador "para dedicar hasta 90 millones de dólares a la compensación de las víctimas".

"Seguiremos buscando justicia para las víctimas si la compañía entra en quiebra", dijo Eric Soufer, director de comunicaciones y asesor de la fiscalía de Nueva York.

Las denuncias de abuso sexual contra Weinstein desataron una avalancha de acusaciones en varios sectores.

Jennifer Lawrence, de 27 años, una de las actrices más conocidas de Estados Unidos, dijo el domingo que cuando se enteró de las acusaciones contra Weinstein "quería matarlo".

"La manera en que destruyó la vida de tantas mujeres. Quiero verlo en la cárcel", dijo al canal de televisión CBS.

Lawrence trabajó con Weinstein y dijo no obstante que éste "nunca fue inapropiado" con ella.

Cualquier paso hacia la bancarrota arrojará más dudas sobre la suerte de varias películas finalizadas que están en un cajón y aún no tienen fecha de difusión, por ejemplo el drama histórico "The current war", con Benedict Cumberbatch como Thomas Edison o "The war with grandpa", una comedia con Robert De Niro.

La compañía también estaba con muchos proyectos en etapas anteriores de finalización, el más notorio uno de Quentin Tarantino sobre la familia Manson aún sin título, y "The senator's wife", una película que según Weinstein confrontaría al poderoso lobby de las armas de fuego, con la actuación de Meryl Streep.

Weinstein fue despedido del cargo de director de la compañía tras el estallido del escándalo, y luego renunció al directorio.

Este hombre casado, padre de cinco hijos, es investigado por la policía de Estados Unidos y Gran Bretaña, pero no ha sido acusado de ningún delito. Asegura que todas sus relaciones fueron consensuadas y supuestamente está bajo tratamiento por adicción sexual.

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