La vida de la actriz y productora británica Lorna Nickson Brown (26) transcurría de manera común y corriente, hasta que en una fotografía, su madre se dio cuenta de algo anormal y se lo hizo saber.
"Mi madre notó un bulto en el lado izquierdo delantero de mi cuello (en una fotografía). Pensó que había perdido un poco de peso, pero tres meses después visité al médico de cabecera que confirmó que se trataba de un nódulo tiroideo", relató Lorna a The Independent.
El nódulo en la tiroides que tenía Nickson Brown era más grande de lo normal y duro al tacto, por lo que lo analizaron en profundidad, y tras cuatro meses de exploraciones, se le realizó una biopsia, se tomó una muestra del nódulo y se examinó. Tras todo ese proceso se llegó a a la conclusión de que era canceroso.
"No me lo creía porque me sentía tan bien", rememora la actriz
El rápido diagnóstico permitió que Lorna Nickson Brown tuviera una intervención muy rápida y que se sanara. A un año de todo eso, la actriz y productora inglesa ha compartido su historia y la fotografía que le salvó la vida.