Hace unos días, un video viralizado en redes sociales terminó en una serie de críticas hacia el pequeño actor Finn Wolfhard de "Stranger things".
El intérprete de Mike en el proyecto de Netflix aparecía cercano a la entrada de su hotel sin tomar en cuenta a los seguidores que intentaban conseguir una foto o un autógrafo y los "fanáticos" se descargaron en redes sociales, tildando al canadiense de 14 años de un invento de ellos mismos.
Al rescate salió Sophie Turner, la popular Sansa Stark de "Game of thrones", y ahora fue el propio Wolfhard el que, cansado de los mensajes, tuvo que utilizar sus redes sociales para dejar en claro que estaba molesto por la situación.
"¡Hola a todos! No quiero excluir a nadie de ser fan, pero si realmente lo eres no acosarás a mis amigos o a mis compañeros. Ya sabéis a quiénes me dirijo", escribió el actor en su cuenta de Twitter.
"¿Por qué tengo que tuitear esto? No lo sé. Cualquiera que se haga llamar a sí mismo un 'fan' mientras sigue activamente a alguien por actuar y hacer su trabajo es ridículo. Piensa antes de escribir", añadió.
Todos los detractores de los mal llamados fans concuerdan en que por más fama que hayan alcanzado son niños y que tener que firmar autógrafos en todo momento o tomarse fotografías no es parte de su trabajo.
