Amanda Holden revolucionó el último capítulo del programa "Britain's Got Talent" con un vestido que mostraba harta piel. Lo que la actriz no esperaba es que varias personas criticaran su atuendo.
Miles de televidentes comenzaron a quejarse en las redes sociales por lo que consideraban un exceso en la forma con que Holden se presentó en el espacio busca-talentos de Inglaterra.
El vestido negro con un gran escote y la espalda descubierta diseñado por el modisto Julien Macdonald, causó furor, pero también tuvo críticas sin límites, al punto de que algunos telespectadores compararon a la jueza del programa con una stripper.
Todas estas críticas se remiten a que la emisión del talent show es considerada apta para toda la familia británica y la opción de ropa elegida por la jueza pudo haber sido interpretada como excesiva.
A raíz de este atuendo, hubo 216 denuncias a la Oficina de Comunicación del Reino Unido, por lo que se inició una investigación sobre el hecho, tratando de determinar si Amanda Holden había violado alguna ley sobre familia y menores de edad.
David Walliams, otro integrante del jurado de "Britain's Got Talent", defendió a su compañera Amanda Holden de las críticas y cuestionó la investigación. Para ello, e irónicamente, logró convencer a un policía que esposara a la actriz.
